Arturo Vidal se quedará en el Barça. Eso, al menos, es su deseo de cara a la próxima temporada. En una entrevista en Mundo Deportivo, el chileno descartó que saliera este mercado veraniego. A pesar de las intenciones del jugador, el club también tiene algo que decir al respeto.
“Me queda un año de contrato y con todo lo que ha pasado, en este momento me siento importante, tengo mucho cariño al equipo, tengo muy buenos amigos y espero terminar mi contrato. Quiero ganar la Champions si Dios quiere y el año que viene ir a por el triplete”, comentó el 22.
Arturo Vidal en un entrenamiento del Barça / FC Barcelona
Arturo Vidal en un entrenamiento del Barça / FC Barcelona
Cuando le repreguntaron sobre el tema, fue más contundente: “Sí, sí, si Dios quiere, seguiré acá”. Esta es su segunda temporada y, tanto con Ernesto Valverde como con Quique Setién, su papel ha sido importante. A sus 33 años sonó con fuerza para entrar en el trueque con Lautaro Martínez, pero parece que ya no es el favorito.
“Me veo levantando la Champions”
Arturo Vidal es, junto a Sergio Busquets, una de las bajas sensibles del Barça para el partido contra el Nápoles. Aunque no estará, explicó cómo deben afrontar el encuentro: “salir a buscarlo desde el primer minuto, hacer nuestro juego, ser agresivos en cada momento y demostrar lo que queremos, dar un mensaje en este partido de lo que pretendemos en el futuro”.
Luego animó a los aficionados con un “me veo levantando la Champions” que matizó con “como el Barcelona que somos tenemos el deber de ganar esta Champions porque lo tenemos todo: equipo y jugadores, pero primero hay que tener mucho respeto al Nápoles. Si hacemos bien las cosas, le podemos ganar a cualquiera”.
El momento de la expulsión de Arturo Vidal ante el Nápoles | EFE
El momento de la expulsión de Arturo Vidal ante el Nápoles | EFE
Si los culés vencen al Nápoles, les esperará en Lisboa el Bayern de Múnich o el Chelsea en cuartos de final. El exequipo de Vidal venció por un contundente 0-3 la ida en Stamford Bridge y son uno de los favoritos para alzar la orejona. El reto es exigente, pero la motivación muy alta.