Desde hace unas semanas, llevar mascarilla es siempre obligatorio en Barcelona. Una medida necesaria para intentar ralentizar los brotes que están sucediendo en la ciudad contal, y evitar un nuevo confinamiento total. Una norma no respetada por muchas personas, entre ellas Samuel Umtiti y Ousmane Dembelé.
Ambos futbolistas llegaron este lunes al Aeropuerto del Prat, tras prácticamente una semana de vacaciones, para reincorporarse al trabajo con el resto del grupo y preparar la vuelta de los octavos de final de la Champions contra el Nápoles, que tendrá lugar el 8 de agosto. Y lo hicieron sin mascarilla.
No obstante, lo peor de todo es que en el momento de salir de la terminal, diferentes aficionados les arroparon y se acercaron más de lo permitido a ellos. No se respetó la distancia de seguridad, y los dos jugadores galos tampoco cumplieron con las medidas reglamentarias. Algo que puede traer consecuencias. En cambio, otros como Messi, Griezmann o Piqué sí cumplieron con la normativa. Hay que destacar que toda la plantilla se sometió este lunes a un nuevo test del Covid-19.
En el centro de los incendios
El principal problema es que tanto Umtiti como Dembelé son reincidentes en este tipo de irresponsabilidades, y además deberían cumplir de forma exigente estas medidas al tratarse de personajes públicos y referencias para muchas personas. El ex del Dortmund, especialmente en sus primeros años en el Camp Nou, fue protagonista más por sus polémicas extradeportivas que por sus acciones dentro del terreno de juego. Malos hábitos, malas compañías, impuntualidad. Parecía que en los últimos meses se había centrado y mejorado su conducta, sin embargo este contratiempo vuelve a demostrar que necesita todavía madurar.
Dembelé, junto a Umtiti en un entrenamiento | FCB
Por su parte, Umtiti está sentenciado en el Barça. Tras no hacer caso a las recomendaciones de los servicios médicos, y decidir no operarse de los problemas en su rodilla para poder jugar el Mundial, su rendimiento no ha sido el esperado. El club ya le ha comunicado que no cuenta con él, no obstante está dispuesto a ir a la guerra y a no facilitar su salida del conjunto azulgrana.