El Celta hará todo lo que esté en su mano para retener a Rafinha este próximo verano, y también al exazulgrana Jeison Murillo. Así lo aseguró el presidente del equipo de Balaídos, que los considera dos piezas fundamentales para su proyecto deportivo. "Si hay alguna posibilidad no habrá problema económico que lo frene. Tenemos claro que podremos afrontar esos dos fichajes", aseguró.
Rafinha durante un partido del Celta de Vigo esta temporada / Redes
Incluso el máximo dirigente celtiña apostó a no hacer ningún refuerzo más, si podían cerrar la incorporación de estos dos futbolistas: "Otra cosa es que al margen de esos dos futbolistas, cuya continuidad supondría un desembolso importante, podamos seguir reforzando el equipo. Pero Murillo y Rafinha ya estaban considerados y ojalá podamos hacernos con ellos".
Perdón por la temporada
No obstante, hay que destacar que la temporada del centrocampista brasileño no ha sido la esperada en tierras gallegas. En agosto salió cedido por el Barça, con el objetivo de recuperar el nivel que ofreció la temporada 2013-14 antes de su periplo con las lesiones. Aunque sus actuaciones han sido mayoritariamente buenas, los gallegos han firmado un curso muy gris en su conjunto.
El centrocampista de 27 años, por suerte, no ha tenido muchos problemas físicos, el principal escollo en su carrera. Ha participado con cierta regularidad llegando a disputar 30 partidos oficiales, marcando cuatro goles y repartiendo dos asistencias. Sin embargo, los celtistas esperaban un poco más de él, y de toda la plantilla en general.
Rafinha, en un partido con el Celta | EFE
Por eso, en una clara muestra de compromiso con el Celta, Rafinha no dudó en pedir perdón por la temporada, donde acabaron cerca de puestos de descenso. Precisamente, este rendimiento del equipo es el que hace dudar al brasileño de cara al curso que viene. Así lo explicó su presidente: "Si todo hubiese salido mejor creo que él estaría incluso con más ganas que cuando llegó hace un año”.
Sin embargo, la realidad es que su futuro depende del FC Barcelona. Su contrato expira en 2021, y el conjunto azulgrana quiere sacar una cantidad importante por él, antes de arriesgarse a dejarle marchar gratis. Una cesión tampoco se contempla. Por tanto, quien quiera hacerse con él, tendrá que ofrecer cerca de 15 millones para sacarle del Camp Nou.