Leo Messi dijo basta. El esperpéntico partido que cuajó el FC Barcelona contra Osasuna fue la gota que colmó el vaso de la paciencia del delantero argentino. Harto de ponerse a la espalda a un equipo sin alma ni ideas, el 10 salió a zona mixta y pronunció unas palabras que dejan en la cuerda floja, muy floja, a Quique Setién.

Que el astro culé y el técnico no se entienden es algo que está claro desde el primer día. Pero nunca había sido tan evidente como este jueves. Messi, aunque empezó apelando a la autocrítica, acabó disparando todas sus balas hacia la misma dirección, y dejó prácticamente sentenciado al técnico cántabro.

Sentenciado

El futbolista argentino aseveró que el partido ante Osasuna ha sido un reflejo de lo que ha sido la temporada del FC Barcelona: "Hemos sido un equipo muy regular, al que le ganan por ganas, que nos crean muy fácil. Fuimos muy irregulares, perdimos puntos donde no deberíamos haberlos perdido".

Setién dando órdenes a Leo Messi en un partido del Barça / FC Barcelona

Setién dando órdenes a Leo Messi en un partido del Barça / FC Barcelona

Y entonces empezaron las balas hacia Setién: "El equipo deja mucho que desear en muchos partidos, dejamos mucho al rival y reaccionamos en la segunda. Parece que hace falta que nos marquen para reaccionar. No nos alcanza ni para la Liga, y si queremos las Champions vamos a tener que cambiar muchísimo. De lo contrario, nos va a eliminar el Nápoles".

Al hablar del rendimiento del equipo, Messi concretó un poco más y señaló que desde enero el nivel que ha ofrecido el FC Barcelona ha dejado mucho que desear. Enero fue el mes en que Quique Setién reemplazó a Ernesto Valverde.

Autocrítica

El delantero argentino, si bien aseveró que el Real Madrid merece el título por haber ganado todos los encuentros tras el parón, matizó que el Barça debe analizar todo lo que ha pasado: "Tenemos que hacer autocrítica. Está bien que el Madrid gane todos los partidos pero nosotros estamos obligados a ganarlos también".

Leo Messi, lamentándose contra Osasuna | EFE

Leo Messi, lamentándose contra Osasuna | EFE

Por último, Messi considera que la afición tiene derecho a estar harta: "La gente del club seguramente está muy enojado con todo lo que vio y es normal. Es lógico que se encuentren de esa manera. Venimos de Roma, Liverpool, la paciencia de la gente se agota y es algo normal".