El VAR calienta la rivalidad Barça-Madrid

El Barça consiguió vencer al Leganés este martes por un cómodo 2-0. Podía haber habido algún gol más. De hecho, lo hubo. En el minuto 64, Antoine Griezmann superaba al Pichu Cuéllar tras un pase de la muerte de Nelson Semedo. Cuando ya estaban los dos equipos listos para reanudar el juego, Martínez Munuera lo anuló.

El VAR tiró la línea de fuera de juego y, cuando el lateral portugués iba al espacio, se encontraba por centímetros un poco más avanzado que la defensa pepinera. Una acción que sin tecnología se hubiera resuelto con el tanto del francés. Cinco minutos después llegó la sentencia de Messi, de penalti, tras una falta muy dudosa.

Publicación sobre el fuera de juego de Semedo contra el Leganés / Twitter

Publicación sobre el fuera de juego de Semedo contra el Leganés / Twitter

¿Disparidad de criterios?

Lógicamente, si el gol de Griezmann no era válido, no debería haber sumado de ninguna manera al marcador. En redes sociales muchos recordaron que este fuera de juego por pocos centímetros se obvió recientemente en el Real Madrid-Eibar (3-1) del pasado fin de semana.

En el minuto cuatro del partido de los blancos, Karim Benzema recibía el balón ligeramente adelantado, en la banda izquierda del ataque. Tras una serie de rebotes le llegaba a Toni Kroos que marcaba un muy buen gol que dejaba el partido encarrilado para los de Zidane. El colegiado Cuadra Fernández ni siquiera consultó el VAR y dio validez al tanto del alemán sin tener en cuenta que la jugada previa debería haber sido invalidada.

Publicación del fuera de juego de Benzema contra el Eibar / Twitter

Publicación del fuera de juego de Benzema contra el Eibar / Twitter

Mirados con lupa

Si los futbolistas necesitan rodaje, también lo parecen necesitar los colegiados. En estas primeras jornadas hemos visto varias decisiones rigurosas como el fuera de juego de Semedo, el de Benzema, el penalti de Messi o la expulsión de Bernardo (RCD Espanyol) contra el Getafe (0-0).

A falta de nueve jornadas, los puntos serán más decisivos que nunca para determinar el campeón, plazas europeas y descenso. Se requiere un arbitraje más seguro y, si la tecnología puede ayudar a ello, se debe usar siempre que se necesite sin excepciones de equipos o partidos.