La crisis del coronavirus ha puesto la economía del FC Barcelona contra las cuerdas. Entre la suspensión temporal de las competiciones, la imposibilidad de disputar los encuentros con público en el Camp Nou y el cierre del Museu y las tiendas, el club azulgrana podría llegar a dejar de ingresar cerca de 150 millones de euros.
Por lo tanto, los 1.047 millones presupuestados a principios de curso quedarán en 900. Dado que se calcularon 990 millones de euros de gastos, la diferencia negativa sería de 90 millones, aunque entre los ERTE y la rebaja salarial del primer equipo la cifra descenderá hasta los 50 millones de euros.
La solución más rápida y efectiva para salvar esta diferencia es el traspaso de futbolistas. El Barça ha ingresado menos de 60 millones en concepto de ventas este ejercicio y la nueva situación le obliga a alcanzar los 124 millones antes del 30 de junio. Teniendo en cuenta que activos como Rakitic, Semedo o Vidal suenan para entrar en los trueques del próximo verano, los dos jugadores que pueden salir para evitar los números rojos cuando se cierre el ejercicio son Ousmane Dembelé y Philippe Coutinho.
¿Qué hacer con Dembelé?
En principio, bastará con la venta de uno de los dos. La duda es de quién debe deshacerse el FC Barcelona. Ambos llegaron con el cometido de hacer olvidar a Neymar y no lo han logrado. Han ofrecido un rendimiento irregular y no se han acabado de adaptar ni al fútbol español ni a los sistemas del equipo azulgrana.
Ousmane Dembelé en un encuentro del Barça / EFE
Dembelé es quien cuenta con más pretendientes, pero también es un futbolista que, por aptitudes, puede ser clave en el Barça del futuro. Tiene únicamente 23 años y técnica y físicamente lo tiene todo para triunfar en el Camp Nou: velocidad, desequilibrio, domina ambos pies y se mueve bien al espacio.
Por contra, es complicado planificar una temporada con él debido a sus recurrentes lesiones. Este curso únicamente ha participado en nueve partidos. En total, ha jugado 74 choques en tres campañas. Su elevada cotización en el mercado viene motivada por lo que apunta a ser, no por lo que ha hecho hasta el momento. Y en ese dilema se encuentra también el Barça, que duda entre darle una última oportunidad o venderlo a buen precio.
¿Y Coutinho?
El caso de Philippe Coutinho es más complejo. El verano pasado, el FC Barcelona lo ofreció a todos los grandes de Europa pero ningún club llegó a presentar una oferta que cumpliera con los requisitos del club azulgrana. Acabó en el Bayern cedido con opción de compra de 120 millones de euros. El conjunto bávaro no pagará tal cantidad y volverá al Camp Nou cuando acabe la temporada.
Coutinho, en un partido con el Bayern de Munich | EFE
Se ha rumoreado con la posibilidad de que Quique Setién le dé una oportunidad, pero la necesidad de ingresos del Barça puede primar por encima de las intenciones del técnico cántabro. Coutinho gusta en la Premier League y también al Inter de Milán, pero la situación es la misma que el pasado verano: aún no hay una oferta firme encima de la mesa.
El FC Barcelona necesita llegar a los 124 millones de euros de ingresos por traspasos antes del 30 de junio. Los dos candidatos a salir son Ousmane Dembelé y Philippe Coutinho. Ninguno está a salvo.