El Barça ya ha vuelto a los entrenamientos, después de que todos los jugadores y miembros técnicos del primer equipo pasasen el test del coronavirus el pasado miércoles. El resultado fue esperanzador: ninguno estaba contagiado. No obstante, la realidad es que faltaba un jugador para pasar esta prueba médica: Ousmane Dembelé.
El francés, lesionado de gravedad el pasado mes de junio, fue excluido por la Liga para volver a jugar esta temporada. Por ese motivo, sus pruebas se programaron días más tarde. No obstante, estos no han sido los únicos inconvenientes que ha tenido el club con el extremo.
Ousmane Dembélé entrenament Barça / FC Barcelona
El galo estaba citado este lunes a las 9.30 horas en la Ciutat Esportiva para someterse al test del coronavirus así como para hacer un control in situ del estado de su lesión en el bíceps femoral de la pierna derecha. Sin embargo, a última hora se decidió que el delantero pasara las pruebas desde su casa para evitar cualquier contacto con sus compañeros en las instalaciones blaugrana, que a esa hora estarían ejercitándose.
Va a la suya
Un nuevo ejemplo de que Dembelé va a la suya. El francés, tras ser operado en Finlandia de su grave lesión en el bíceps femoral de la pierna derecha, decidió pasar el confinamiento en Francia. El problema es que prácticamente no dio señales de vida, hasta el punto que ni tan siquiera estuvo presente en la reunión telemática de la plantilla que convocó Quique Setién el 14 de abril.
A Dembelé le esperan como mínimo tres meses más de duro trabajo. Su objetivo es llegar a la Champions, en caso de que esta se reanude en agosto. Sin embargo, su actitud y su historial de lesiones no hacen sino presagiar que el club tendrá que seguirle muy de cerca, para que no vuelva a caer en viejos hábitos.
Setién, junto a Dembelé en un entrenamiento | FCB
El Mosquito se encuentra ante su última oportunidad de convencer a los dirigentes azulgranas. Cada vez más voces apuestan por su salida. De hecho, no se descarta que salga en verano, aunque solo si llega una oferta millonaria o si PSG o Inter lo exigen en las operaciones Neymar y Lautaro Martínez. Ahora, todo depende de él.