En la planificación de la próxima temporada, un elemento que tendrá que tener muy en cuenta la dirección deportiva es decidir cuál es el futuro a corto plazo de los jugadores cedidos. Ahora mismo, el Barça tiene a ocho jugadores en otros equipos: Coutinho, Rafinha, Aleñá, Cucurella, Todibo, Wagué, Miranda y Oriol Busquets. A estos, además, hay que sumarle a Emerson en una operación a tres bandas entre el Atlético Mineiro, el Betis y el Barça.
Aleña, destino Camp Nou
De todos estos jugadores mencionados, el que tiene más opciones de quedarse en el Barça es Carles Aleñá. El centrocampista ya se hizo un pequeño hueco en el equipo, pero Ernesto Valverde no terminó de confiar en él. El catalán, por lo tanto, probó suerte con una cesión de medio año en el Betis, donde ha tenido sus oportunidades a pesar que en los últimos partidos fue un poco de caída.
Sin embargo, el canterano es una de las esperanzas para renovar la plantilla y es evidente que goza del ADN del Barça. De todos modos, también habrá que tener en cuenta la gran nómina de centrocampistas que habrá en el equipo y si puede tener minutos. A su vez, en Sevilla también informaron que el Betis no descartaba alargar la cesión, por lo que habrá que ver cuál es la decisión de ambos clubes y del jugador.
Las posibles ventas
Uno de los grandes problemas que tiene actualmente el Barça es que no tiene suficiente dinero para fichar. De este modo, los jugadores cedidos pueden ser una oportunidad de ingresos. El que parece más claro que ya no seguirá como azulgrana es Marc Cucurella. El Getafe tiene una opción de compra de 6 millones de euros y parece estar dispuesto a ejercerla para quedárselo o poderlo vender a un precio más caro. Además, el Barça se garantizó un 40% de una futura compra.
El jugador con el que el Barça podría sacar una cantidad más grande es Coutinho. El Bayern de Múnich no está dispuesto a ejercer la opción de compra de 120 millones de euros, pero sí que hay otros clubes interesados. El Chelsea es uno de los que más se han acercado, por lo que podría entrar en la puja.
Con quién hay más dudas sobre su futuro es con Rafinha. El hispano-brasileño está viviendo una segunda etapa como cedido al Celta y es un club con el que tiene mucha unión y podría ser su destino. El centrocampista tuvo algunos momentos de brillantez en el Barça, pero las lesiones le lastraron y parece difícil que el club confíe en él. Asimismo, su contrato termina en 2021 por lo que los gallegos lo podrían conseguir a buen precio.
Los jóvenes
Oriol Busquets, Miranda, Todibo y Wagué se encuentran actualmente en sus primeras etapas del fútbol profesional y necesitan tener minutos para crecer. Busquets es el que ha tenido más oportunidades en el Twente, pero los otros no han llegado a los 10 partidos. En el Barça, salvo Todibo, también parece una quimera que vuelvan a corto plazo.
La cesión de Juan Miranda al Shcalke 04, de hecho, es de dos años y termina en 2021. Así como la de Oriol Busquets, no se contempla una opción de compra. En el caso de Wagué, en cambio, el Niza sí que tiene una opción de 10 millones de euros. De todos estos la duda será si se buscará otra cesión o una venta.
De estos cuatro, el que tendría más opciones de regresar es Todibo. En sus pocas apariciones con el primer equipo ya demostró tener facilidad en la salida de balón, pero también algunos despistes defensivos. El Schalke 04 tiene una opción de compra de 25 millones que el Barça puede doblar. Su rendimiento determinará su futuro, pero podría ser una opción si la directiva no encuentra otro central.