Uno de los grandes culebrones del próximo mercado de fichajes será sin duda la llegada de Lautaro Martínez al Barça. El delantero argentino es el elegido por la cúpula azulgrana para ser el heredero de Luis Suárez en un futuro próximo. Este curso, ya ha demostrado ser uno de los goleadores con más futuro de toda Europa.
Con solo 22 años, su curso es de notable alto. Sus16 goles en 31 partidos han acabado de convencer al club culé para apostar por su incorporación. La idea es que pueda alternar minutos con el charrúa, aprenda de su experiencia, y en pocos años sea la referencia ofensiva de la plantilla. Un plan que atrae especialmente al ariete del Inter, que ya ha dado su sí al FC Barcelona y a jugar al lado de Leo Messi.
Más lejanas están las posturas entre los dos equipos. El conjunto italiano espera que los azulgranas paguen su cláusula de 111 millones, o incluyan alguno de sus jugadores más valiosos en un trueque, como Griezmann o Arthur. Algo que Bartomeu intentará evitar a toda costa. Por eso, ambos clubes están a la espera de que el jugador se pronuncie públicamente sobre sus deseos, y permita desencallar toda la operación.
Crespo lo aleja del Barça
Por tanto, ahora mismo la pelota está en el tejado de Lautaro. El delantero está comprometido y contento en Milán, pero sabe que podría ser su último tren para jugar junto a su gran ídolo, Leo Messi, y disfrutar junto a él de sus últimos años de magia. Un argumento que podría acabar de convencerle de apostar por su llegada al Camp Nou.
No obstante, no son pocas las presiones que está sufriendo estos días el argentino. El último en pronunciarse sobre su futuro fue la leyenda de la albiceleste, y del Inter de MIlán, Hernán Crespo. En una entrevista al medio italiano La Gazzeta dello Sport, Crespo declaró que lo mejor para Lautaro sería "quedarse en el Inter" para completar su crecimiento, antes de dar el salto a un nuevo equipo.
Hernán Crespo, en su etapa en el Inter de Milán | REDES
"Yo le digo que debe quedarse en el Inter, sin ninguna duda. La razón es simple. Él lo hizo bien en Argentina con el Racing Avellaneda, llegó al Inter y fue suplente de Mauro Icardi en la primera temporada y ahora es un titular fijo", afirmó. "Esta es su primera temporada como titular fijo. Es poco para decidir cambiar de vida e ir al Barcelona. Necesita al menos tres años para completar su crecimiento, luego podrá pensar en un cambio de equipo", sentenció.