La oferta del Barça a Neymar para impedir que fichara por el Real Madrid

Neymar fue el protagonista indiscutible del mercado veraniego de 2019. El futbolista brasileño copó portadas desde principios de junio hasta finales de agosto. No por su rendimiento futbolístico, sino por la incerteza que rodeaba su futuro. El delantero quería cerrar su etapa en el París Saint-Germain y volver al FC Barcelona.

El astro carioca se ofreció al club azulgrana por todos los medios. Habló con los jugadores, con el presidente y también con miembros de la directiva. El Barça y Neymar acercaron posturas a nivel económico, pero faltaba lo más complicado: convencer al PSG para que aceptara traspasarlo.

La entidad culé lo intentó todo. Òscar Grau, Javier Bordas y Eric Abidal se desplazaron a París con André Cury, amigo de la familia Neymar. El FC Barcelona puso infinidad de propuestas sobre la mesa, pero Al-Khelaifi no cedió. El resto de la cúpula parisina tampoco. Y el fichaje se volvió imposible.

Promesa

Hasta cierto punto, Neymar estuvo cerca de volver a vestir de azulgrana. Tampoco le faltó mucho para jugar en el Santiago Bernabéu. El Real Madrid, viendo que el PSG no iba a vender al brasileño al Barça, contactó con la entidad parisina y tanteó al futbolista. Al-Khelaifi guarda mejor relación con Florentino Pérez que con Josep Maria Bartomeu.

Neymar Junior celebrando un gol delante de un Parc des Princes vacío / EFE

Neymar Junior celebrando un gol delante de un Parc des Princes vacío / EFE

La entidad de Chamartín puso toda la maquinaria en marcha y aprovechó el deseo de Neymar de salir del Parque de los Príncipes para tratar de convencerlo. Wagner Ribeiro y Pini Zahavi, dos agentes que guardan buena relación con la familia del astro brasileño, le sondearon y le hicieron saber que sería bienvenido en Madrid.

Para evitar que Ney vistiera de blanco, pues hubiera sido un colofón desastroso del culebrón, la junta directiva le prometió al delantero que su regreso al Camp Nou era cuestión de tiempo: "O vienes este año o vienes el que viene, eso seguro". Esas palabras bastaron para evitar el aterrizaje del carioca en el Santiago Bernabéu.

Indiferencia

El juramento del FC Barcelona demuestra, fundamentalmente, que a Neymar le era más o menos indiferente jugar en el FC Barcelona o en el Real Madrid. El único deseo del brasileño era salir del París Saint-Germain. No le hubiera supuesto ningún problema jugar en Chamartín si eso significaba su marcha de Francia.

Neymar en un encuentro con el PSG /EFE

Neymar en un encuentro con el PSG /EFE

Finalmente, por suerte para la directiva culé, el astro brasileño aceptó la promesa y se quedó un año más en el Parque de los Príncipes. Espera que sea el último. Ahora al Barça le toca cumplir lo prometido. Aunque la crisis del coronavirus haya dejado las arcas del club tiritando.