Pese a las constantes desilusiones, la confianza del Barça en Dembelé sigue intacta. La mala fortuna se ha cebado con el francés desde que llegó al conjunto azulgrana en verano de 2017, a cambio de 125 millones de euros. En estas prácticamente tres temporadas, ha estado más tiempo en la enfermería que disponible para jugar y se ha perdido un total de 63 encuentros. No obstante, muchas personas de la entidad le siguen considerando una joya para el futuro.
En el extremo galo, de solo 22 años, se valora muy positivamente su cambio de mentalidad y su adaptación al fútbol de primer nivel. Ha dejado totalmente de lado los malos hábitos con los que llegó a Barcelona, y ahora está centrado solo en trabajar y mejorar hasta conseguir hacerse un hueco en el once azulgrana.
Ousmane Dembelé en un partido del Barça / EFE
Las molestias físicas que le acompañaron las dos primeras temporadas fueron fruto de su mala condición física y sus rutinas erróneas. No obstante, este curso Dembelé preparó su cuerpo a conciencia para evitar una nueva lesión. Por eso, los últimos problemas en el bíceps femoral del muslo derecho, que le dejarán en el dique seco durante seis meses, solo pueden deberse a la mala suerte. O al menos, de esa manera lo justifica el Barça.
Cuenta con muchos valedores dentro del club
Por tanto, Dembelé, con contrato hasta 2022, podría no haber perdido todavía su última oportunidad de triunfar en el Camp Nou. Y es que, por encima de todo, en el conjunto azulgrana no quieren dar por perdido todavía a un jugador con un talento sobrenatural, y todavía mucha carrera y margen de crecimiento por delante.
Esta opinión es la que comparten muchos de los miembros de la junta directiva azulgrana. Pese a sus lesiones, el francés siguen contando con suficientes y poderosos valedores dentro del Barça como para mantener su apuesta en favor del extremo.
Ousmane Dembelé en un entrenamiento antes del Levante / FC Barcelona
Según avanzó Mundo Deportivo, el club cuenta con informes internos de técnicos y doctores, que avalan una nueva dosis de confianza que él podría demostrar incluso esta temporada si, como desean los clubs, se alarga durante todo el verano. Todos creen que en plena condición física y respondiendo él a todas las exigencias que precisa la vida de un futbolista profesional, Ousmane Dembélé es una joya para el equipo.
Solo saldría por una oferta bomba
Por tanto, ahora todo depende de él. Si consigue superar sus problemas con las lesiones, y sigue manteniendo los hábitos saludables como ha hecho esta temporada, en el Barça están dispuestos a darle una nueva oportunidad y confiar en él.
Es uno de los jugadores de los que no se quiere prescindir el próximo verano. No obstante, los problemas económicos provocados por el coronavirus ha dejado al club azulgrana con poco margen de maniobra. Se enfrenta a un verano clave para el futuro deportivo, con muchas operaciones sobre la mesa. Y Dembelé podría ser la llave de alguna de ellas.
En este sentido, y aunque se considera una joya en potencia, sí es cierto que en este mercado se tendrán que tomar decisiones dolorosas que favorezcan al equipo. Y Dembelé cuenta con muchos apoyos para ser un gran jugador para el futuro, pero de momento no ha conseguido demostrarlo sobre el campo. Un hecho que hace que no sea del todo intransferible. Eso sí, si le venden quieren que sea a precio de oro.