El Barça vuelve a liderar la Liga, después del tropiezo del Real Madrid en el campo del Betis. A falta de 11 jornadas para el final, el conjunto azulgrana ocupa la pole position en una carrera de fondo que acabará llevándose el equipo que cometa menos errores. Y es que tantos culés como madridistas están lejos de sus mejores números en la competición de la regularidad.
Resulta sorprendente que el conjunto azulgrana, tras todas las polémicas que ha sufrido el club este curso y con un cambio de entrenador incluido, esté primer clasificado en la Liga. Un hecho que solo demuestra que su gran rival, el Madrid, tampoco está en su mejor futbolístico.
Messi, ante Kroos en un Barça-Madrid | EFE
Porque la realidad es que, con la llegada de Quique Setién al banquillo, al Barça le sigue costando sobreponerse en muchos encuentros y poder dominar a través del balón. Y eso ha llevado al técnico culé, un loco por el control, a poner en práctica algunas estrategias que no han convencido y han provocado más de un susto al barcelonismo.
Los vicios del Barça de Setién
Es tan extremo el planteamiento con balón de Setién, que este estilo empieza desde los saques de portería. En los últimos partidos, Ter Stegen, por órdenes del banquillo, se ha negado a sacar en largo ninguna posesión. A través de los dos centrales, la idea es incitar a los rivales a presionar arriba, y construir la jugada desde la misma portería, para poder superar las líneas rivales. Una estrategia que ha perjudicado al equipo en muchas ocasiones, y ha estado cerca de permitir al conjunto rival recuperar en una zona decisiva.
Ter Stegen, con problemas para sacar el balón | EFE
Otra de las grandes carencias que ha demostrado el Barça de Setién es su incapacidad de parar las transiciones rivales. Una de las claves del fútbol que quiere practicar el técnico santanderino es jugar solo en medio campo, y dominar por completo la posesión. Una táctica que da a los rivales pocas opciones de atacar. No obstante, la principal arma de los contrarios es salir rápido al contraataque en cuanto recuperen el balón, para intentar sorprender a una descolocada defensa culé. Unas salidas rápidas que tampoco están sabiendo para los azulgranas, sufriendo especialmente con la velocidad de los rivales.
Finalmente, el gran problema que ha demostrado en estos meses el equipo a las órdenes de Setién es la desconexión en las segundas partes. Algo que ya pasó también con Ernesto Valverde. El conjunto azulgrana ha sido capaz de mostrar su mejor y su peor fútbol en un mismo partido. Se ha convertido en un equipo con luces y sombras. Y no siempre acaba prevaleciendo la luz. Algo que pudo verse en el Santiago Bernabéu y que también estuvo a punto de pagar caro ante la Real Sociedad.
Messi lamenta la derrota ante el Athletic en el último segundo | EFE
En una Liga que se decidirá por detalles y por minimizar errores, estos son los tres grandes vicios en los que tendrá que trabajar la plantilla si quiere llevarse el título más difícil y disputado de los últimos años, con los dos grandes del fútbol español en uno de sus peores momentos.