Partido engañoso en el Camp Nou este sábado. El Barça recibe a las 16 horas al Getafe, sorprendente tercer clasificado de Primera División con 42 puntos, siete menos que los culés. José Bordalás, entrenador de los azulones, se está revelando como un gran técnico y llega a esta jornada con el objetivo de reducir la diferencia en la clasificación.
El conjunto madrileño acostumbra a jugar con un clásico 4-4-2 con un juego muy duro, directo y sin grandes pretensiones de jugar bien. Llevan cuatro partidos sin conocer la derrota y ha superado a rivales difíciles como Valencia (3-0), Athletic Club (0-2), Real Betis (0-1) y Leganés (0-3). Como se puede deducir de estos resultados, no será fácil marcarles un gol.
Bordalás dirigiendo al Getafe en Liga / EFE
A esta gran defensa del Getafe se tiene que sumar que el Barça no vive los mejores momentos de la temporada de cara a gol. Luis Suárez está lesionado mientras que Antoine Griezmann y Leo Messi están en plena sequía y les cuesta horrores marcar un tanto. Para superar esos problemas, Quique Setién sigue trabajando en un sistema para romper la muralla azulona.
El sistema de Setién
En el Benito Villamarín vimos un sistema que no conocíamos con el cántabro en el banquillo. Se trataba de un 4-4-2 con rombo: Sergio Busquets ocupaba el pivote, con Sergi Roberto y Frenkie de Jong en los interiores y Arturo Vidal como mediapunta. En la segunda parte, Arthur Melo sustituyó al chileno. Lo importante era jugar por dentro.
Todo hace pensar que, contra el Getafe, en el Camp Nou, se espera que el equipo recupere el 4-3-3 para abrir el campo y atacar por las bandas. En Sevilla descansó Ansu Fati y podríamos volver a ver el tridente con Griezmann y Messi amenazando el arco de David Soria.
Los jugadores del Barça celebran el gol de De Jong ante el Betis | EFE
El mejor rendimiento de los culés ha sido con tres delanteros en punta, como vimos contra el Athletic Club (0-1) y Levante (2-1). Se espera ante el conjunto de José Bordalás un cierto intercambio de golpes: profundidad por las bandas mientras los visitantes seguirán con su juego duro y con el objetivo de salir a la contra con Cucurella, Molina, Ángel y Nyom como amenazas principales.
La gran duda
Quique Setién aún no se ha decidido sobre qué centrocampista debe acompañar a De Jong y a Busquets. En los últimos dos partidos, Sergi Roberto ha sido titular, uno en el extremo y otro en el interior. Tiene números de repetir en el once, pero no se descarta un jugador más vertical como Arturo Vidal.
Sergi Roberto en una acción contra el Granada / EFE
Otra de las opciones es apostar por un jugador más conservador, que asegure la posesión, el juego horizontal y no cometa tantas pérdidas. Arthur Melo e Ivan Rakitic entran en las quinielas. Se debe tener en cuenta que no estará Clement Lenglet como central y que se debe reducir los riesgos entre medular y defensa para evitar que Samuel Umtiti sufra.