La sequía de Messi con Setién
El delantero argentino encadena varios partidos sin ver puerta
10 febrero, 2020 10:41Golpe de autoridad del FC Barcelona en el Benito Villamarín. Tras el triunfo del Real Madrid en el Reyno de Navarra, el conjunto azulgrana estaba obligado a ganar si no quería alejarse de la pelea por la Liga. El Real Betis se puso por delante hasta en dos ocasiones, pero los de Quique Setién se acabaron imponiendo gracias a los tantos de Frenkie de Jong, Sergio Busquets y Clément Lenglet.
Aunque no vio puerta, el más destacado del encuentro fue Leo Messi, omnipresente. El delantero argentino se puso el equipo a la espalda y lo llevó hacia su segunda victoria consecutiva en Liga. En sus pies nacieron los tres goles de los culés. Repartió tres asistencias por primera vez esta temporada y ya es el máximo asistente de la competición.
Frenado
Si el 10 no marcó fue, en gran parte, por mérito del arquero bético, Joel Robles. Pese a los tres goles, el ex del Everton completó un partido reseñable. El delantero argentino tuvo tres ocasiones muy claras en el Villamarín, pero el guardameta madrileño las desbarató todas. La goleada podría haber sido escandalosa.
Messi es agarrado por Bartra | EFE
La parada más espectacular se produjo en el 61'. Messi regateó a Bartra, se quedó solo ante el portero, disparó con la derecha y Joel sacó una mano milagrosa y mandó el esférico a córner. Poco después, en el 66', probó con una vaselina similar a la que logró el año pasado frente al propio Betis, pero se le marchó algo desviada.
Salvando las distancias, la actuación de Joel recordó a la de Unai Simón el pasado jueves. El guardameta del Athletic Club fue el héroe de su equipo tras atajar dos disparos que parecían goles cantados. Primero desvió un tiro de Griezmann y, poco antes del gol de Williams, frenó a Messi en un mano a mano.
Tres
Y es que el delantero argentino no acaba de estar fino de cara a puerta desde la llegada de Quique Setién. Sigue siendo el referente azulgrana, pero ese liderazgo no se traduce en goles. Con el técnico cántabro en el banquillo, el 10 solo ha sido capaz de anotar tres goles en seis encuentros: uno contra el Granada en Liga y dos frente al Leganés en Copa.
Messi celebrando su gol frente al Leganés / EFE
Con el choque ante el Real Betis del pasado domingo, Messi encadena tres partidos consecutivos sin anotar. Tuvo muchas ocasiones contra el Levante, pero no pudo transformarlas. La que tuvo en San Mamés se la desbarató Unai Simón. Y en el Villamarín, pese a que las jugadas parecían claras, Joel evitó que La Pulga señalara con sus dedos índice al cielo de Sevilla.
Mientras llega y no ese esperado reencuentro con el gol, Leo muestra su versión más generosa. Las tres asistencias que dio frente al Real Betis se suman a las dos que repartió a Ansu Fati contra el Levante. Sea marcando, asistiendo o creando la jugada, la importancia de Messi en el Barça es indiscutible. Se siente quien se siente en el banquillo.