Retrocedamos por un momento a principios de enero. Pese al empate en Cornellà-El Prat, parecía que el FC Barcelona vivía una situación tranquila. El juego no era el mejor, pero los resultados eran óptimos. El equipo marchaba líder en Liga y se había clasificado cómodamente para octavos de final de la Champions League.

La derrota en la Supercopa de España contra el Atlético de Madrid lo cambió todo. De repente, el puesto de Ernesto Valverde empezó a peligrar. El club lo desmintió en un primer momento, pero la visita a Xavi en Doha, pocas horas después, lo confirmó. Grau y Abidal ofrecieron al egarense coger las riendas del equipo de inmediato, pero este declinó la oferta al sentir que aún no era su momento.

No era finalista

Pese a esta propuesta, fuentes del club aseguran a Culemanía que el técnico del Al-Sadd no se encontraba entre los tres finalistas para relevar al Txingurri. De acuerdo con estas fuentes, había tres nombres en la agenda que destacaban por encima del resto: Massimiliano Allegri, Mauricio Pochettino y el entrenador actual, Quique Setién.

Quique Setién en la rueda de prensa previa al partido contra el Leganés / EFE

Quique Setién en la rueda de prensa previa al partido contra el Leganés / EFE

En cuanto al preparador italiano, fue él mismo quien se ofreció para aterrizar en el banquillo del Camp Nou, pero su filosofía de juego no acababa de encajar con el ADN Barça. Por lo que respecta al ex del Tottenham, era bien visto por el núcleo duro del vestuario, pero sus palabras en que aseguraba que no entrenaría jamás al club azulgrana le acabaron costando muy caras.

Finalmente acabó llegando Quique Setién, que si bien no tiene palmarés, tiene una filosofía de juego idónea para el FC Barcelona. En su presentación explicó que el día anterior estaba asegurando con las vacas. Desde el club, sin embargo, aseguran que llevan sondeando a técnicos desde octubre.

Sondeo

¿Entonces lo de Xavi qué fue? Pues bien, si bien es cierto que se le ofreció entrenar al Barça de inmediato, desde el club aseguran que la intención principal era sondearlo para conocer sus intenciones. Saber para cuándo se veía preparado y si estaba dispuesto a coger el equipo en un futuro no muy lejano.

Xavi Hernández dirigiendo un partido con el Al Sadd / EFE

Xavi Hernández dirigiendo un partido con el Al Sadd / EFE

 

Como ya dijimos hace semanas, se le transmitió la idea de que el Camp Nou era su casa y que podía regresar cuando quisiera. Sin presionarlo, solo cuando se sintiera preparado y considerara que era el momento de tomar las riendas del equipo. Y visto lo visto, resulta evidente que su momento aún no ha llegado. 

Xavi no estaba entre los tres finalistas, pero durante unos días se acabó convirtiendo en la principal prioridad. Tras mucho sopesarlo, el egarense rechazó la oferta y dio la oportunidad a Setién de cumplir uno de sus sueños.