Arturo Vidal no está nada satisfecho con su rol en el FC Barcelona. El futbolista chileno es importante en los esquemas de Ernesto Valverde, pero no tanto como le gustaría serlo. Si bien es cierto que ha participado en 15 de los 20 encuentros que se han disputado hasta la fecha, solo ha sido titular en cuatro de ellos. Este martes, en Milán, formará parte del once por quinta vez esta temporada.
El futbolista chileno no duda en expresar su malestar ante la prensa. Hace unas semanas, en una entrevista para TV3, espetó que "si en diciembre o cuando acabe la temporada no siento que soy importante, tendré que buscar una solución y ampliar horizontes para serlo". Se colocaba, de esta forma, a sí mismo en la rampa de salida.
En enero, imposible
Por mucho que él mismo se ponga en el mercado y amenace con irse en enero, es una salida inviable. Tanto Ernesto Valverde como Josep Maria Bartomeu han señalado en las últimas horas que es una pieza muy importante en el equipo. En consecuencia, su marcha en el mercado invernal obligaría al club a buscarle un reemplazo.
La victoria corrió a cargo de Arturo Vidal/ EFE
La victoria corrió a cargo de Arturo Vidal/ EFE
Mientras el técnico ratifica su confianza en él cada vez que habla en sala de prensa, el presidente fue más allá. Bartomeu aseguró que la venta de Arturo Vidal "nunca" se podría producir en enero. Sin embargo, abrió la puerta a una posible salida en verano: "En algunos casos los dejamos ir, en otras los convencemos".
La realidad es que, si bien es cierto que jugadores como Busquets, De Jong, Rakitic o Arthur parecen un escalón por encima, el chileno tiene mucha relevancia en los esquemas de Valverde. Su capacidad para llegar al área contraria, su carácter e intensidad y su buen trabajo en la presión le convierten en un jugador diferente. No hay otro como él en el FC Barcelona.
Revulsivo, sí; titular, no
Esas características le convierten en un revulsivo de oro. En todos aquellos partidos que se le complican al conjunto azulgrana, el chileno ofrece una ayuda inestimable. Se vio, por ejemplo, en el choque frente al Inter de Milán que se celebró en el Camp Nou. Su pasión, su garra y su anarquía cambiaron el partido por completo.
Vidal pide más minutos a Valverde/ EFE
Vidal pide más minutos a Valverde/ EFE
Su principal problema es que un jugador de sus características, con poco rigor táctico y no mucha técnica con el esférico en los pies, no puede (o no debe) ser titular en un equipo como el FC Barcelona. Más que por la dimensión, por la idea de juego: un equipo que trata de cuidar el balón, de comandar los partidos y que rehuye el ida y vuelta, no puede partir con Arturo Vidal de inicio.
No es nada nuevo. Es algo que se sabía desde que el chileno aterrizó en el Camp Nou. Lo debía saber el club y probablemente también él. Su labor es impagable, pero resulta evidente que no puede ser imprescindible.