El 'Principito' Griezmann carbura desde que se lleva bien con Messi

Poco a poco, la MSG está convirtiéndose en una delantera temible. Un hecho que ya se preveía con la llegada de Griezmann al Barça el verano pasado, pero que ha necesitado de unos meses para empezar a mostrar todo su potencial.

El francés llegó al conjunto culé en medio de una gran polémica. Tras haber anunciado en julio de 2018, a través de un documental, que decidía continuar en el Atlético de Madrid; solo un año después, volvió a mostrarse a través de un video, para declarar que esta vez sí, fichaba por el club azulgrana.

Sin embargo, su manera de actuar en este sentido se ganó muchas críticas y reprobaciones. Además, a algunos futbolistas de la primera plantilla del Barça, entre los que se encontraba Leo Messi, se sintieron traicionados por el primer documental del galo.

Inicio difícil

Los primeros meses de Antoine Griezmann en el Barça no fueron fáciles. El delantero no pudo coincidir prácticamente en ningún momento con Suárez y Messi en el campo (por las lesiones de los dos últimos); y cuando lo hicieron, no conseguían compenetrarse. Un distanciamiento que también era palpable fuera del terreno de juego, con el capitán del conjunto culé mostrándose hostil y apático.

El efecto balsámico que produce en Griezmann el gol y que precede a la sonrisa / EFE

El efecto balsámico que produce en Griezmann el gol y que precede a la sonrisa / EFE

Y es que Leo Messi seguía dolido por el famoso documental de La Decisión emitido en verano de 2018 donde Griezmann vacilaba a madrileños y catalanes. Consideraba que era una falta de respeto y que su tren ya había pasado. El Barça buscó ficharlo ese mismo verano -cuando más lo necesitaba el equipo-, pero volvió un año después hasta convencerlo.

Así, las críticas no tardaron en llegar contra el ex del Atlético, que se veía claramente fuera de sitio y con unos números y una precisión muy por debajo de los que había mostrado en el equipo colchonero.

El acercamiento de Messi

Sin embargo, cuando las cosas se ponen difíciles es cuando realmente hay que arrimar el hombro y superar los obstáculos entre todos. Así, tras un inicio titubeante de los azulgranas, Messi decidió actuar de capitán, en todos los sentidos.

Por una parte, en el terreno de juego. Siendo decisivo en ataque y buscando de forma constante a un Griezmann que, sintiendo la confianza y el apoyo del astro argentino, ha mejorado de forma notable en su juego y de cara a portería.

Messi, Griezmann y Suárez celebrando un gol / FC Barcelona

Messi, Griezmann y Suárez celebrando un gol / FC Barcelona

Y por otra, fuera del campo. En este caso, Leo contó con la inestimable ayuda de su gran amigo Luis Suárez. El uruguayo le convenció que era lo mejor para el Barça, que debían entenderse y que no valía la pena seguir con ese juego. Así, la semana pasada ya se reunieron los tres con sus respectivas parejas para cenar y estrechar su amistad. Ha empezado una relación que se asemeja mucho a la que tenían con Neymar Junior, siempre muy próximos.

Sin duda, que Griezmann cuente con la aprobación dentro del vestuario de Leo Messi es un elemento clave de cara a que el francés pueda triunfar en el Camp Nou, y que el Barça pueda contar con su delantera temible para conseguir los objetivos de la temporada.