Cada dia que pasa, se descubre un nuevo hito que no hace más que demostrar que Messi es uno de los más grandes jugadores de la historia del fútbol. Esta semana, el argentino ya levantó su sexto Balón de Oro, rompiendo así el empate que había con Cristiano Ronaldo, y convirtiéndose en el futbolista que más veces lo ha conseguido.
Messi posa con sus seis Balones de Oro | EFE
El éxito del 10 del Barça durante todos estos años se ha cimentado en una calidad inhumana, una inconcebible visión de juego, la capacidad de adaptarse a sus compañeros y muchos, muchos goles. No obstante, no podría haber conseguido ni la mitad de todos sus éxitos e hitos individuales si no se hubiese cuidado, tanto mental como físicamente, para conseguir una regularidad asombrosa.
Esta es una de las grandes características que hacen que Messi no tenga rival: el hecho de que ha mantenido un nivel estratosférico de forma ininterrumpida durante más de una década.
El dato que demuestra su grandeza
El Observatorio del Fútbol CIES publicó un estudio que hace referencia a la composición de los equipos de las cinco grandes ligas durante la última década. En él aparecen datos como el número de futbolistas utilizados por cada equipo en los últimos diez años, la media de edad de las plantillas en este intervalo de tiempo o el porcentaje de jugadores de diferentes nacionalidades.
Entre ellos, aparece un dato demoledor que demuestra el impacto de Messi no solo en el Barça, sino en toda Europa, y el principal motivo de su grandeza. Messi es el jugador de campo, en los últimos diez años, que ha disputado un porcentaje más alto de minutos con su equipo, el Barça. Así, el argentino ha estado presente en un 83,4% de todos los partidos que ha jugado el equipo azulgrana en la última década.
Un número sobrehumano, solo superado por el guardameta del Olympique de Marsella, Steve Mandanda, con un 84,2%. Poniendo en perspectiva, el jugador que lidera al Real Madrid en este campo es Sergio Ramos con un 74,2%. Es prácticamente inconcebible que, durante más de diez años, un futbolista haya conseguido mantenerse en lo alto de la ola sin bajar su rendimiento y sin que los problemas físicos le afecten. Sin embargo, ya hace tiempo que muchos piensan que Messi no es humano.
Necesidad de un cambio en la plantilla culé
Por otra parte, otro de los hechos que pone de manifiesto el estudio del CIES es que el Barça empieza a necesitar una revolución importante de la plantilla. El club culé es el octavo equipo de toda Europa, durante la última década, con una media de edad de sus jugadores más alta, con 27,62 años.
Una foto de Luis Suárez, Gerard Piqué y Leo Messi durante un entrenamiento del Barça / FCB
Así, los Suárez, Piqué o Messi (32); y los Busquets (31) y Jordi Alba (30) deberían empezar a dejar paso a futbolistas mucho más jóvenes, de cara a rejuvenecer la plantilla y asegurar el futuro futbolístico del club azulgrana.