Ya llueve menos para Ivan Rakitic. El futbolista croata parece haber superado el inicio de temporada más complicado desde que llegó al FC Barcelona. Después de haber sido titular en solo uno de los 16 primeros encuentros, el centrocampista balcánico ha partido de inicio en los choques contra Borussia Dortmund y Atlético de Madrid.
Ha recuperado la confianza de Ernesto Valverde. Había sido imprescindible en las dos primeras temporadas del Txingurri, pero la llegada de Frenkie de Jong y la progresión de Arthur le habían dejado en un segundo plano. Sin embargo, en los dos compromisos más importantes del curso hasta la fecha nadie ha podido apartarlo del once.
Se deja querer
Este lunes, mientras Messi recibía el Balón de Oro en París, Ivan Rakitic se desplazó hasta Sevilla para recibir el premio a los valores otorgado por El Desmarque. Tras recoger el premio, el futbolista croata habló de su situación en el FC Barcelona. Las dos últimas titularidades le han empujado a cambiar ligeramente su discurso.
Ivan Rakitic en el partido contra el Atlético de Madrid / EFE
Del "no estoy en Barcelona para pasear por la playa" y el "me han quitado la pelota, estoy triste" que pronunció hace unas semanas ya no queda nada. El veterano centrocampista señaló que "mi idea es seguir. Lo que quiero es jugar, disfrutar del fútbol. Todavía puedo dar muchísimo y, si puedo jugar, no hay mejor sitio que el Barça".
Sin embargo, Rakitic mostró su ilusión de poder volver a vestir algún día la camiseta del Sevilla. El azulgrana explicó que "si llega el momento de poder hablarlo, yo encantado. Ojalá se pueda cumplir algún día, pero sobre todo me alegro del rumbo que está tomando el club, los resultados que tiene. Se ve a un Sevilla mejor cada año. Mi sueño sería vestir otra vez la camiseta del Sevilla".
El problema
Como ya avanzó Culemanía, el club hispalense tanteó a Ivan cuando pasaba por un mal momento en el FC Barcelona. Ante sus manifestaciones de que no era feliz en el Camp Nou, desde la capital andaluza le abrieron la puerta en todo momento y le hicieron saber que estarían encantados de que regresara.
Rakitic en el partido contra el Borussia Dortmund / EFE
El principal problema para que se pudiera concretar este movimiento es básicamente económico. Parece complicado que, a día de hoy, el Sevilla pueda pagar el precio que desea la entidad catalana y ofrecer a Rakitic el mismo salario que tiene en Can Barça. A no ser que club y jugador rebajen sus pretensiones, la vuelta del futbolista croata al Sánchez Pizjuán está muy lejos de producirse.
Su regreso al cuadro hispalense es poco más que una utopía. Además, su situación en el FC Barcelona ya no es la de hace unas semanas y, como él mismo reconoce, si tiene minutos no tiene por qué buscar una salida.