En los últimos tiempos, el juego del Barcelona ha conseguidos más valoraciones negativas que positivas y eso algo que la entidad azulgrana desea revertir cuanto antes. Con el mercado de invierno a la vuelta de la esquina, son muchos los nombres que suenan para recalar en las filas de Barça, sin embargo, desde los despachos del club se trabaja con la cabeza fría.
Algunos de los candidatos que el Barcelona tiene sobre la mesa para el centro del campo, son Fabián Ruíz, actualmente en las filas del Nápoles, y Saúl Ñíguez, jugador del Atlético de Madrid. A ellos podría sumarse aún una tercera opción que diera recambio a Rakitic y cuyo estilo de juego se asemeje al del croata.
Calidad y juventud en un mismo hombre
Por su parte, Fabián vive inmerso en los problemas del Nápoles con las altas esferas y su renovación con el club italiano sigue en espera. El sevillano no tiene si continuar o no en su actual club, ya que los malos resultados del equipo en la Serie A, tampoco ayudan demasiado.
Si el de Los Palacios decide finalmente cambiar de aires, el Barça tendría una buena opción para pujar por el andaluz y su coste rondaría los 60 millones de euros.
Por otro lado está Saúl Ñiguez. El futbolista rojiblanco está en el punto de mira del Barcelona desde hace tiempo y si el conjunto colchonero decidiera ponerle a la venta, los culés tendrían preferencia. Cuando el Barcelona traspasó a David Villa al Atlético de Madrid, ambos equipos acordaron que los azulgranas partirían con ventaja si Saúl se pusiese algún día en el mercado.
Con esta clausula, el Barça podría traer a Ñíguez al Camp Nou, pero su coste actual sería mucho más elevado que el que hubieran pagado los catalanes en su primer tanteo, en 2016.
Relevos para la línea de ataque
El Barcelona busca talento y juventud a partes iguales. Jugadores con buena técnica, gol y despliegue físico, capaces de ayudar también en labores defensivas.
Además de Fabián y de Saúl, el Barça necesita incorporar tanto a un delantero centro, como a un extremo. En la primera posición, Luis Suárez lidera el equipo a día de hoy, pero el charrúa está cerca de los 33 años y su habilidad física ya no es la que era.
En cuanto a la plaza de extremo, Griezmann y Dembelé no están dando los resultados que previamente se esperaba de ellos. Ambos tienen calidad en sus botas y así lo han demostrado en sus anteriores clubes. Sin embargo, tanto uno como otro parecen haber descuidado traerse ese talento al Barcelona.
Hasta la fecha, ni Ousmane ni Antoine han destacado con la camiseta azulgrana, por lo que la afición comienza a desesperarse y desde el club se les podría estar buscando una salida.
Más solidez en la retaguardia
La cuarta posición en la que el Barcelona cojea es en la del central. Gerard Piqué cada vez está más inmerso en sus negocios personales con vistas a su futuro, y Umtiti hace tiempo que dejó de ser fiable.
El francés parece estar abonado a las lesiones, responsables, además, de que su excelente labor en la zaga culé se haya visto frenada.
Todibo y Araujo gusta al club, pero ambos son demasiado jóvenes como cargar con tal responsabilidad, pues aún les quedan muchos aspectos a mejorar. Además es esto, Todibo lleva colgado en cartel de transferible y se espera que su salida se realice durante el mercado de invierno. Por su parte, Araujo sigue siendo jugador del Barça B y continuará participando con el filial hasta que esté listo, bajó las órdenes de García Pimienta.