Messi se ha convertido con el paso de los años en uno de los mejores (por no decir el mejor) jugador de la historia. Un futbolista respetado tanto por compañeros como por rivales, que no han dudado en defender su grandeza.
Sin embargo, no todo han sido rosas en el camino de Leo. El argentino también ha tenido que pasar por momentos muy difíciles durante su carrera para llegar a la cima mundial. Un hecho que el 10 destacó en el documental Becoming Leo Messi, realizado por OTRO, y donde es el único protagonista.
Así, Messi destacó que sus inicios en el club no fueron del todo fáciles. “La verdad es que fue feo, fue duro. Lo más lindo es jugar y entrenar y no poder jugar fue duro al principio”, explicó. Las lesiones fueron uno de los grandes impedimentos para que Leo pudiese disfrutar del deporte que ama en sus primeros meses en Barcelona. “Cuando pude jugar acá después de dos, tres o cuatro meses, me lesioné en mi primer partido y estuve un mes y medio parado también. Fueron tiempos duros, pero nunca se me pasó por la cabeza volver”.
El astro argentino comentó que toda su familia volvió a Argentina, y que la adaptación de su más allegados, y en concreto de su hermana, no fue fácil. Finalmente, acabaron quedándose solo él y su padre, y aunque este le consultó en muchas ocasiones si sentía la necesidad de marcharse, Messi declaró que “yo siempre tuve claro que me quería quedar."
El apoyo de Ronaldinho
En el documental, Messi también habló sobre el recuerdo de su primer gol con la camiseta azulgrana, que anotó el 1 de mayo de 2005, hace prácticamente 15 años. El argentino declaró que “fue muy especial, incluso la celebración. Siempre tuve el cariño del vestuario".
Además, el de Rosario no dudó en comentar que todavía cobró más importancia por la persona que le hizo llegar el balón; Ronaldinho, uno de sus grandes apoyos en el equipo. “Ronaldinho hizo que yo me sintiera más relajado, que fuese yo mismo y me pude soltar más rápido. Desde que llegue al vestuario del primer equipo, Ronaldinho fue el primero en abrazarme, en ponerme debajo de sus brazos y guiarme en todo momento. La verdad que no solo él, sino todo el vestuario hizo de la misma manera", remarcó.
Messi y Ronaldinho celebran el primer gol del argentino con el FC Barcelona | EFE
Innumerables títulos colectivos e individuales
Messi es un verdadero coleccionista de títulos, tanto a nivel colectivo como individual. El argentino destacó que el trofeo que más alegría le hizo fue la de Roma, la segunda en su currículum. "No sabía después si se iba a repetir o no. No era consciente en ese momento y bueno, por suerte se me pudo dar otra vez, comentó.
El astro remarcó también el excelso nivel de juego que practicó el equipo en aquella final, ante nada más y nada menos que el Manchester United. "La manera de jugar de ese equipo era impresionante. Lo hizo durante todo el año y hacerlo en esa final contra un gran Manchester también. Fue terminar un año impresionante", afirmó.
El Barça, celebrando la Champions conseguida en Roma | EFE
Por otra parte, el delantero también lamentó no haber disfrutado suficiente y no sentir como suya la Champions ganada en 2006 en París, a las órdenes de Frank Rijkaard. "En el 2006 tuve la desgracia de lesionarme en la vuelta de octavos contra el Chelsea y ya después no pude jugar más y la verdad que no la disfruté tanto como la disfruté en el 2009, lo cual me arrepiento también, porque era muy chico y no me daba cuenta de las cosas y en ese momento no disfruté lo que tenía que haber disfrutado de haber ganado una Champions League".
En cuanto a los premios individuales, reconoció que le llena de orgullo haber sido reconocido en cinco ocasiones con el Balón de Oro, pero que sin duda el más especial fue el de 2010, en la que copó el podio con dos compañeros del Barça surgidos también de la cantera, Andrés Iniesta y Xavi Hernández, por este orden: "La imagen esa de los tres nominados para el Balón de Oro fue especial para nosotros por la amistad que tenemos, por estar tanto tiempo en el mismo club, por vivir los tres lo mismo prácticamente durante toda la carrera de chico y especial para el club. Por lo que significa, la verdad, fue impresionante".
Messi, celebrando el Balón de Oro junto a Xavi e Iniesta| EFE