A Leo Messi le ha salido gran competencia para alzar de nuevo la Bota de Oro. Hace un mes se celebraba el acto de entrega del sexto galardón que lo acreditaba como máximo goleador de las ligas europeas en la temporada 2018-19. Difícilmente pueda volver a repetir la gesta esta temporada.
Con el hat-trick anotado este sábado, el argentino se coloca con ocho goles (16 puntos) en la clasificación por el galardón. Sus registros generales son muy buenos y, de hecho, es el único argumento ofensivo que tienen por ahora los de Valverde: nueve goles y cinco asistencias en 11 partidos.
La gran competencia
Si el curso pasado fue Kylian Mbappé quien le aguantó el pulso al 10 hasta el último momento, esta temporada será Robert Lewandowski. El delantero del Bayern de Múnich de 31 años está firmando unos numerosos escandalosos con su equipo. Ha marcado en todas las jornadas ligueras -11- y también en los cuatro partidos de Champions League.
En total suma 23 goles en 17 partidos oficiales, un registro al alcance de pocos. En la Bundesliga es el máximo goleador en solitario con 16 dianas y lidera la clasificación de la Bota de Oro con 32 puntos. Este sábado, contra el Borussia Dortmund (4-0) firmó un doblete.
A esto, cabe destacar que los bávaros no pasan por un buen momento. La semana pasada fue destituido Niko Kovac y aún están buscando a un entrenador. Son terceros en la liga alemana con 21 puntos, a cuatro del líder, el Borussia Monchengladbach. En Europa llevan pleno de victorias.
Las otras dos amenazas para el galardón
En el segundo lugar del ranquin encontramos a una de las sorpresas de la temporada, Erik Sorga. El delantero del Flora Tallinn lleva 31 goles en la liga de Estonia. Al ser una liga menor, el coeficiente no es dos, sino uno. Por lo tanto, lleva 32 puntos en la clasificación.
Otra de las sorpresas de la tabla es Ciro Immobile, que ocupa el tercer lugar. El delantero de la Lazio suma 13 goles (26 puntos) en la Serie A italiana. Teniendo en cuenta que juegan la Europa League, lleva 15 tantos -y cuatro asistencias- en 14 partidos. A la larga, parece que Messi pueda alcanzarlo.