Como ya había sucedido en temporadas anteriores, el arranque de curso del Atlético de Madrid está dejando muchas dudas. Ni los resultados ni el juego que plasma el equipo satisfacen a la afición. Si bien es cierto que en Champions ha logrado siete puntos de nueve posibles, en Liga solo ha podido ganar cuatro encuentros en las nueve primeras jornadas (cuatro empates y una derrota).
Más allá de la dificultad para sacar los partidos adelante, que es prácticamente una seña de identidad del 'Cholo' Simeone, lo más preocupante es la fragilidad defensiva que exhibe el conjunto rojiblanco. Ha recibido siete goles en doce partidos y Oblak se ha visto obligado a ejercer de salvador en más de una ocasión.
Proyecto nuevo
Ya advirtió el técnico argentino durante la pretemporada que, pese a los excelsos resultados cosechados durante el verano, no sería fácil engranar a un equipo prácticamente nuevo. Cabe recordar que jugadores como Filipe Luis, Diego Godín, Antoine Griezmann, Juanfran o Lucas Hernández se marcharon al final del pasado curso. En su lugar llegaron Renan Lodi, Felipe, Joao Félix, Trippier y Mario Hermoso.
Joao Félix en una acción con Sergio Ramos / EFE
O lo que es lo mismo, se fueron futbolistas que tenían totalmente interiorizados el sistema y el plan de juego de Simeone y llegaron jugadores que, excepto Hermoso, jamás habían jugado en la Liga española. El nuevo proyecto requería paciencia y calma, parecía complicado que los resultados fueran inmediatos.
Pero el mundo del fútbol no entiende de temple, menos aún cuando se trata de un grande como el Atlético de Madrid. La afición está preocupada por el estado de su equipo y empieza a pedir responsabilidades. Los primeros en ser señalados han sido Koke, capitán, y el propio 'Cholo' Simeone.
Derecho de tanteo
Aún queda mucha temporada, pero si la situación no se revierte podrían producirse salidas de algunos de los pesos pesados de la plantilla. Y el FC Barcelona ya está al acecho. El club azulgrana está especialmente atento al futuro de Saúl Ñíguez y José María Giménez, jugadores por los que guarda derechos de tanteo después de pagar 15 millones de euros al Atlético de Madrid.
Giménez y Saúl celebrando un gol con el Atlético de Madrid / EFE
Ambos podrían llegar siempre y cuando el club colchonero esté dispuesto a venderlos, ellos se quieran marchar y haya un club interesado en ellos. En ese caso, el Barça podría igualar la oferta del equipo en cuestión y hacerse con los servicios de un pilar rojiblanco. Giménez, como relevo de Samuel Umtiti si sigue sin mostrar seguridad. Saúl, como alternativa a Fabián, el preferido de la secretaría técnica.
Para que todo esto suceda deben concretarse una serie de condicionantes que a día de hoy parecen una utopía. El Atlético de Madrid tiene tiempo de sobras para cambiar la situación y salir de la crisis. Pero si no lo hace, el FC Barcelona estará atento para llevarse a alguna de sus 'perlas'.