El Barça de Ernesto Valverde no es el Barça de Guardiola. Ni el Barça de Tata Martino. Cada entrenador que coge las riendas del equipo lo hace con sus convicciones e intentando sacar el máximo rendimiento a las piezas de las que dispone. Pero siempre respetando las ideas y la mentalidad del club. Y en el caso del equipo culé, no solo cobran importancia las victorias, sino también la manera en las que se consiguen.
Así, las circunstancias actuales que rodean a los azulgranas hacen que su juego no se centre exclusivamente en dominar al equipo contrario a través del balón, sino a buscar diferentes alternativas en ataque y muchas veces, una aceleración en el ritmo de juego y a la hora de finalizar las jugadas. Este hecho ha comportado que el dominio de la posesión esta temporada no sea tan apabullante como nos tenía acostumbrado el club culé.
Ningún partido entre el top 10 europeo
Según un estudio publicado por el Observatorio de Fútbol CIES, y realizado por la compañía de datos de fútbol InStat, ningún partido del Barça esta temporada se encuentra entre los diez primeros de todas las ligas europeas con mayor posesión del balón.
La clasificación la lidera la victoria del Fulham contra el Millwall, de la Segunda División inglesa, con un 78,7%. El mismo porcentaje que consiguió el Shakhtar Donetsk en su victoria en el campo del FK Lviv. En cambio, el mayor porcentaje de posesión de balón que ha conseguido el Barça esta temporada es un 68,8%, en la victoria en casa contra el Betis y la derrota en San Mamés en la primera jornada de Liga.
Dominio en la Liga Española
Aunque los datos de posesión no sean tan extensibles a nivel europeo, sí que hay que destacar el dominio a la hora de tener el balón del equipo catalán en La Liga. El Barça es protagonista en cinco de los diez partidos con más posesión de balón.
Por tanto, pese a que el club entrenado por Ernesto Valverde no está protagonizando actuaciones estelares e históricas en cuanto a la posesión de balón, es importante insistir en el hecho que esta temporada el Barça está siendo fiel a su estilo, teniendo como máxima el conseguir victorias dominando el juego y ofreciendo espectáculo a sus aficionados. Porque, por mucho que pase, es muy difícil desligarse totalmente de tu forma de ser.