Leo Messi habla poco, pero cuando lo hace todos le escuchan. En el túnel de vestuarios, en los entrenamientos y, como no, ante la prensa. Sus declaraciones suelen dar pie a un sinfín de interpretaciones y lecturas varias --como ocurrió en su última entrevista y el polémico fichaje frustrado de Neymar Jr.-- pero esta vez no dio pie a interpretaciones ni especulaciones.
Todo lo contrario. Su discurso fue conciliador. Suavizar las declaraciones de Piqué en Getafe, valorar la importante victoria ante el Inter en Champions League y lanzar un guiño público a uno de sus compañeros, el héroe inesperado de la noche. El bombero que apagó lo que podría haber sido un incendio irreparable en Europa. Arturo Vidal.
El chileno sustituyó en el 52 a Sergio Busquets --dejando claro que ya no es intocable-- y cambió el partido. Las correcciones del Txingurri a la media parte y la entrada de Vidal acabaron de decantar la balanza para el Barça y culminar la remontada.
Elogios para el chileno
El futbolista chileno estuvo inconmensurable. Entró al terreno de juego, Valverde cambió el esquema -- del tradicional 4-3-3 al 4-2-3-1-- ubicando a De Jong y Arthur en el doble pivote y dejando al 22 con libertad en la mediapunta. Omnipresente. Ese sería el adjetivo para describir su actuación. Con o sin balón. Entregado en la recuperación, en las ayudas y coberturas y especialmente inspirado en ataque. Suya fue la asistencia a Suárez en el primer tanto de la noche que acabó en el fondo de la red tras una gran definición del uruguayo.
Es uno de los centrocampistas que más está sufriendo el overbooking de la medular esta temporada, pero respondió ante la necesidad del equipo. Ordenó al equipo y distribuyó el esférico por todo el frente de ataque y sobre todo, contagió su garra y entrega. Y ante la evidente influencia que tuvo en el juego, Messi elogió su actuación.
Cuestionado por ello, espetó: "Arturo te da muchísimo, es un jugador que cuando entra, contagia, recupera, llega, juega. Es un jugador muy importante para nosotros y es bueno que hoy haya tenido estos minutos y se haya sentido importante porque es un jugador importantísimo para el vestuario". Un guiño claro y un discurso propio de un capitán que necesita tener a toda la plantilla motivada.
Sobre la victoria y su participación también tuvo un mensaje optimista: “Estoy contento de haber jugado los 90 minutos, tenía muchas ganas. Me sentí bien, obviamente cansado al final. Quería arrancar de una vez. A medida que vayan los partidos voy a ir soltándome más. Durante el año, como jugamos cada tres días no podemos entrenar fuerte y estoy acostumbrado a mantenerme con los encuentros”.
"Necesitábamos ganar. Es un grupo complicado, ganar de local es importantísimo. Estamos bien, era importante ganar hoy. Lo importante es hablar de la victoria de hoy, de la de Getafe. Es básico para que no se genere el lío que hay cuando no hay fútbol””, dijo el 10 azulgrana.