El Camp Nou volvió a estar a la altura. La terrible noticia del fallecimiento de Xana, la hija de Luis Enrique, conmovió al mundo del fútbol. Su fallecimiento generó un sinfín de homenajes en todos los estadios españoles e incluso en Roma, donde el técnico asturiano militó durante una temporada.
La jornada tres estuvo marcada por minutos de silencio y mensajes de ánimo al exentrenador nacional, pero el Camp Nou no pudo rendir su homenaje particular a la pequeña y a uno de los técnicos azulgranas más laureados. Y ante el regreso del equipo al feudo azulgrana, la afición se volcó. Con un estadio lleno, la mayoría de los aficionados acudieron al Camp Nou de luto. Vestidos con camisetas negras para dar su particular último adiós a la pequeña y mandar un mensaje de apoyo total a Lucho de parte del barcelonismo.
El club azulgrana también quiso rendir su respetuoso homenaje a Xana. El Barça todavía no había jugado en el Camp Nou desde la triste noticia y por ello los jugadores de Valverde lucieron brazaletes negros. Asimismo, se guardó un minuto de silencio antes del encuentro.
Silencio y cánticos
Pero no fue el único gesto del barcelonismo. La hinchada guardó silencio en el minuto 21 de cada parte en honor al dorsal que lució Luis Enrique durante su carrera como azulgrana para posteriormente corear su nombre en el 22. Un gesto colectivo de una afición que quiso mostrar su apoyo.
Una foto de Luis Suárez celebrando un gol ante el Valencia /EFE
Tampoco se olvidaron de lo ocurrido los goleadores, especialmente Luis Suárez, quien vivió bajo las órdenes de Lucho su mejor época de azulgrana. Tras anotar su doblete particular, el uruguayo dedicó sus goles a la pequeña fallecida mirando al cielo y haciendo una X con los dedos, la inicial de su nombre.
El Camp Nou se volcó para mandar su último adiós a Xana.