Ousmane Dembelé lo tiene claro, pese a la cantidad de detractores que ha recolectado en dos temporadas muy cuestionables en el Camp Nou y un historial de episodios polémicos extenso. Quiere triunfar en el Camp Nou vestido de azulgrana. Ese es su único sueño y objetivo. Una meta que se fijó en el verano de 2017, cuando fichó por la entidad azulgrana, y que no ha cambiado en dos años.
Esta será su tercera temporada en Can Barça, pero el foco de atención está sobre su persona. Volvió renovado, dispuesto a demostrar un cambio, pero la lesión en San Mamés frustró su planes. Una situación que se agravó tras eludir las indicaciones médicas del club. Y pese al ostracismo que ha demostrado Ernesto Valverde en cuestiones relativas al jugador y algunos toques de atención, públicos y privados, que ha recibido por parte de sus compañeros, Dembelé no cede.
El francés se negó rotundamente a entrar en la operación Neymar Jr. Trasladarse a París no entraba en sus planes. Su entorno también se mostró inamovible y reveló las palabras que el jugador confesó a su entorno: "No importa quién venga, la competencia no me asusta y lucharé para imponerme aquí". Una actitud que también corroboró y reveló L'Equipe. El Barça "es el club de sus sueños".
Una puerta cerrada
Según el rotativo francés, y tal y como el mercado ha demostrado, Dembelé cerro la puerta a cualquier salida de la capital catalana. Pese a tener en sus manos el traspaso de Neymar no hubo forma de convencerlo. Ni tan siquiera Tuchel, quien fue su mentor y entrenador en el Dortmund, consiguió hacer dudar al joven extremo. Sus objetivos deportivos pasan por ser azulgrana y sabe que en el Camp Nou podrá aspirar a otro de sus sueños: ganar el Balón de Oro.
Un objetivo que hoy por hoy está lejos de cumplirse, dado su rendimiento y falta de continuidad, pero que aspira a conseguir en algún momento. Además, Dembelé se negó a entrar en la operación pero no veía con malos ojos la incorporación del brasileño. La competencia no se presentaba como un problema pese a que Valverde y el vestuario estuvieran claramente a favor de la llegada del carioca.
El mensaje de Dembelé es claro, pero le falta demostrarlo en el verde.