12 goles y tres asistencias en 10 encuentros y actuaciones memorables no fueron suficientes para que Leo Messi se pudiera llevar el premio a mejor jugador de la UEFA. Una vez más, la prematura eliminación del FC Barcelona de la Champions League acabó con las aspiraciones del 10 de ser nombrado el mejor jugador de Europa.
El astro argentino fue superado por Virgil van Dijk, la gran revelación de la pasada temporada en el viejo continente. Fue uno de los pilares del Liverpool en la conquista de la última Champions League. El zaguero holandés, que también logró el premio de mejor defensa, fue un auténtico muro atrás y una amenaza aérea constante en los córners.
Sin desmerecer los méritos del futbolista neerlandés, el máximo organismo europeo volvió a premiar al mejor jugador del equipo campeón y no al que para muchos fue el mejor de la competición. Por enésima vez, en un galardón estrictamente individual, volvieron a tener demasiado peso las actuaciones del equipo en el que jugaron.
Respeto
El otro aspirante al premio era Cristiano Ronaldo, que pese a ser eliminado en cuartos de final con la Juventus de Turín se ganó un sitio en el podio por delante de otros futbolistas del Liverpool como Sadio Mané y Alisson. En este caso sí que primaron las actuaciones individuales, no lo que hicieran sus respectivos equipos.
Cristiano y Messi se saludan en la gala de la UEFA / EFE
Cristiano y Messi se saludan en la gala de la UEFA / EFE
El delantero portugués y Messi exhibieron muy buena sintonía a lo largo de la gala. Risas, conversaciones distendidas y cordialidad. De hecho, antes de nombrar al mejor jugador, la presentadora del acto, Reshmin Chowdury, se sentó junto al argentino y al portugués para hacerles una pequeña entrevista.
De forma relativamente sorprendente, el 10 y el 7 se alabaron mútuamente. Leo señaló que "era una rivalidad linda", mientras Ronaldo calificó su competencia como "historia del fútbol", pues han estado más de 15 años compitiendo de tú a tú, y admitió que le gustaría compartir una cena con el argentino.
De Jong sí triunfa
Esta buena sintonía solo se rompió cuando Messi fue nombrado, a modo de consolación, mejor delantero de la UEFA superando a Sadio Mané, referente ofensivo del Liverpool, y el propio Cristiano Ronaldo. En ese momento, la cara del futbolista de la Juventus cambió por completo y no hizo ningún gesto para felicitar al 10 mientras las cámaras lo enfocaban.
El premio de mejor centrocampista también acabó en Can Barça. Tras una temporada gloriosa con el Ajax, Frenkie de Jong superó a Jordan Henderson y Christian Eriksen en la votación. El ahora jugador azulgrana fue una de las grandes sorpresas de la pasada temporada, dominando el tempo de los encuentros como si de un veterano se tratara.
Los otros dos galardones acabaron en Anfield. Aparte del ya mencionado de mejor defensa, que cayó en brazos de Van Dijk, Alisson también se impuso en la votación de mejor portero. El brasileño superó a Hugo Lloris y a Marc-André Ter Stegen. El pastel de los premios se lo repartieron entre Liverpool, FC Barcelona y Ajax.