Una de las grandes prioridades del FC Barcelona en el mercado de fichajes fue fichar a un futbolista que pudiera dar descanso a Jordi Alba a lo largo del curso. El de l'Hospitalet cumplió 30 años el pasado mes de marzo y no puede asumir la carga de partidos del último curso. En el club azulgrana son conscientes que, si quieren ver la mejor versión del catalán, deben dosificarlo.

Además, el jugador que se buscaba también debía poder competir por la titularidad en el lateral izquierdo. Y, tras peinar el mercado, la entidad catalana dio con Junior Firpo, carrilero de 22 años que destacó las dos últimas temporadas con el Betis. El Barça cerró la incorporación del futbolista por 18 millones de euros fijos más 12 en variables.

Una foto de los jugadores del Barça celebrando el tanto de Jordi Alba al Betis / FCB

Una foto de los jugadores del Barça celebrando el tanto de Jordi Alba al Betis / FCB

Junior Jordi Alba presentan muy perfiles muy similares que, en principio, deben ser rivales para formar parte del once azulgrana. Rápidos, hábiles con el balón en los pies, incisivos en ataque y correctos en defensa. Con el paso de los años, el exbético debe heredar el puesto que ha ocupado el de l'Hospitalet durante las últimas siete campañas.

¿Compatibles?

En el duelo contra el Real BetisErnesto Valverde demostró que si bien en principio competirán por la misma posición, también pueden ser compatibles. Junior debutó en partido oficial entrando en el 79', ya con el partido sentenciado, y lo sorprendente fue que no relevó a Alba, sino a Rafinha.

Firpo ocupó el lateral izquierdo y el catalán pasó a ubicarse en la posición de extremo. Aunque era la primera vez que actuaban juntos, se compaginaron a la perfección. Cuando el exbético subía, el de l'Hospitalet reculaba y le guardaba la espalda. Si era el 18 quien se internaba, el 24 se quedaba algo más rezagado.

Una foto de Junior Firpo en su debut con el Barça / FCB

Una foto de Junior Firpo en su debut con el Barça / FCB

Coincidieron poco más de diez minutos y es muy pronto para extraer conclusiones sobre la efectividad de la apuesta de Ernesto Valverde, pero resulta evidente que, aunque a priori son rivales, el Txingurri les ve compatibles. Aunque ocupan la posición de lateral, ambos tienen mucha facilidad para incorporarse al ataque.

Con el paso del tiempo se verá si el hecho de que jugaran juntos ante el Real Betis fue a raíz de las numerosas bajas que tenía el FC Barcelona en la delantera o, por el contrario, es una solución real para Valverde. Por lo que se vio ante el cuadro verdiblanco, el técnico extremeño considera que pueden jugar juntos.