La polémica no cesa cuando el protagonista se llama Ousmane Dembelé. Después de que se filtrase que se iba en viaje exprés a Senegal, su agente Moussa Sissoko tuvo que desmentir la información y confesó que "estuvo en Rennes" con su madre. Sin embargo, ello no le eximirá de recibir un castigo.
Según comentaron este martes en Radio Barcelona, Dembelé será sancionado con una multa económica por haber desobedecido a los servicios médicos del Barça. Al parecer, el club pretendía hacerle nuevas pruebas, pero el galo decidió marchar porque tenía unos días libres y, según han publicado otros medios, llegó a pasar más de cinco horas en el aeropuerto, donde estuvo durmiendo mientras esperaba a su inseparable Moustapha Diatta.
Los médicos del Barça le habían recomendado reposo antes de diagnosticarle una rotura fibrilar en el bíceps femoral de la pierna izquierda que le iba a tener de baja unas cinco semanas. Dembelé hizo caso omiso y marchó a visitar a su madre a Rennes antes de hacerle las pruebas pertinentes.
Alegó tener un tirón
Al parecer, el delantero blaugrana alegó que solo había sufrido un tirón. Al regresar a Barcelona se le pudo diagnosticar el alcance exacto de la lesión, mucho más grave de lo que se pensaba de primeras.
Por este motivo, el club sancionará al jugador, que se fue a toda prisa el sábado, tras el partido del viernes en San Mamés, para no perder el vuelo. Fuentes del entorno de Dembelé entorno alegan en su defensa que no lo citaron de manera obligatoria, que fue tan solo una recomendación.
Anteriormente, el club ya le multó con una sanción de entre 100.000 y 200.000 euros.