El Barça jugó esta madrugada el cuarto partido de pretemporada contra el Nápoles. Con la baja de Leo Messi, Ernesto Valverde apostó por una delantera con Antoine Griezmann, Luis Suárez y Carles Pérez. Ousmane Dembelé esperó su turno desde el banquillo, salió en la segunda parte.
El ex del Atlético de Madrid volvió a ser titular con los azulgranas. El entrenador culé quiere darle minutos al delantero para que se vaya adaptando poco a poco al sistema culé. Estuvo mejor que en los últimos partidos, probando al portero y asociándose con sus compañeros.
Empieza la conexión Suárez-Griezmann
Sin Messi en el equipo, el francés compartió 45 minutos con el nueve uruguayo. Sabe que si quiere ser importante en este equipo se debe entender con la dupla suramericana. Por ese motivo, se le vio muy participativo y conectando a menudo con Luis Suárez.
Durante la gira asiática, Griezmann no pudo contar con la presencia ni del argentino ni del charrúa. Durante sus primeros partidos con la camiseta azulgrana se le ha visto muy participativo e intentando combinar al primer toque siempre que puede. Parece que tiene claro que, si quiere triunfar, tiene que ganarse el afecto de Messi y esto pasa por entenderse con su amigo.
Los primeros días del 17 en el Camp Nou no han sido los más fáciles de su carrera. Aunque tiene muy buena sintonía con los franceses, aún se debe ganar la confianza del capitán y de su grupo. Ésta es la tarea pendiente. Aprovechará la gira por Miami para intentar hacer buenas migas con el delantero centro.
“Se tiene que adaptar al juego del Barça”
Tras compartir unos minutos en el Joan Gamper, esta madrugada salieron ambos de inicio. “Después de los minutos del otro día es el segundo partido que jugamos juntos y creo que es el comienzo de la cantidad de minutos que vamos a tener juntos a lo largo de la temporada”, explicó Suárez pidiendo a la prensa paciencia con el francés.
Arturo Vidal y Luis Suárez tras el partido contra el Nápoles / EFE
“Es un grandísimo jugador, por algo está en el Barça, pero obviamente se tiene que adaptar a lo que es el juego del Barcelona, que no es nada fácil, a todos los jugadores le cuesta en un principio, él es un jugador muy inteligente y esperemos que se adapte lo más rápido posible”, añadió.
Sobre su estado de forma explicó que “terminé el partido con cansancio, es complicado al ser los primeros minutos de la pretemporada, además con el cambio de hora se hace más difícil, tratando de agarrar el ritmo lo más rápido posible para el comienzo de la Liga”.