Tic-tac, tic-tac. A medida que pasan las horas, Antoine Griezmann está un poco más cerca de convertirse en nuevo jugador del FC Barcelona. Todo indica que el fichaje es inminente. Este viernes por la mañana se ha visto a su abogado entrando en la sede de la Liga en Madrid para depositar los 120 millones de euros de la cláusula de rescisión que dejan al futbolista libre.
12 días después de que su cláusula descendiera de 200 a los mencionados 120 millones de euros, el FC Barcelona hará efectivo el pago y Griezmann será jugador azulgrana en las próximas horas. El francés estaba en el punto de mira del club catalán desde hace dos años y este viernes, por fin, se completará su fichaje.
Semana tensa
El culebrón Griezmann se ha alargado más de lo debido. Hace algo más de un año su fichaje parecía hecho, así lo apuntaban todas las informaciones, pero finalmente el jugador acabó reculando y tomó la decisión, documental mediante, de quedarse en el Atlético de Madrid un año más.
En marzo, tras la pronta eliminación del cuadro colchonero de la Champions League, el caso se reabrió. Con el paso de las semanas el conflicto entre el FC Barcelona, la entidad rojiblanca y el jugador se ha ido intensificando, llegando a su punto álgido esta última semana, cuando más cerca estaba el traspaso.
Antoine Griezmann durante un encuentro con el Atlético de Madrid / EFE
La frase "Griezmann está al caer" que pronunció Bartomeu el pasado viernes no gustó nada al Atlético de Madrid, que emitió un duro comunicado recriminando la actuación del club blaugrana y del propio futbolista. Citaron al jugador a entrenar y éste no se presentó acogiéndose a los 30 días de vacaciones.
El amparo del francés terminaba este viernes y no le quedaba más remedio que presentarse a entrenar o exponerse a una dura sanción. Y precisamente ha sido este viernes cuando el FC Barcelona, con más demora de la que se esperaba, ha depositado los 120 millones de euros de la cláusula de rescisión del futbolista. El fichaje es inminente.