Luis Suárez está de regreso. A su nivel habitual y con la misma o más ambición que demuestra con el Barça, pero esta vez con la camiseta de Uruguay. La Copa América es uno de los deseos del delantero charrúa. De hecho, su operación de rodilla antes de la final de la Copa del Rey y tras caer eliminados ante el Liverpool le trajo muchas críticas.

Muchos acusaron su falta de implicación con el equipo en un momento crucial para el conjunto catalán tras el varapalo europeo. Muchos entendieron que pasar por el quirófano era una declaración de intenciones: dar prioridad absoluta al campeonato internacional para dejar de lado un trofeo menor como la Copa del Rey. 

Una visión que el delantero desmintió con un comunicado posterior a la intervención con un mensaje que ha mantenido en todas sus declaraciones públicas. Esta vez, en una entrevista al programa Tu diràs de RAC1, el delantero azulgrana volvió a aclarar parte de este asunto. 

Lo explicó en un comunicado tardío, pero volvió a hacer hincapié en la realidad: "Tenía el menisco roto, es la realidad, lo que me tocaba en ese momento. Acabé con molestias, con la rodilla dolorida, me fui a hacer una resonancia y tenía el menisco roto" y añadió: "Era miércoles y decidí operarme el jueves. Tampoco hubiera jugado la final de la Champions", aseguró.

Prioridades

Una ausencia que hubiera sido muy sonada en el Wanda Metropolitano, tanto como lo fue en el Benito Villamarín, pero que molestó al delantero por la impotencia que le causaba: "Me dolió que hablaran sin saber y sin justificación de la lesión. A los que me criticaron les preguntaría si pueden jugar con el menisco roto. No tiene nada vez con lo que tuve durante todo el año, una lesión de cartílago con la que sí pude seguir jugando, cuidándome y gracias a un trabajo espectacular con toda la gente del club”.

 

Luis Suárez celebra un gol con el FC Barcelona / EFE

Luis Suárez celebra un gol con el FC Barcelona / EFE

Asimismo, también remarcó el duro golpe psicológico que supuso el KO en Champions: “Te duele muucho la forma como terminó la temporada, faltando dos semanas era todo espectacular, con la posibilidad de ganar tres títulos, pero el fútbol tiene estas cosas, nos volvió a pasar. Hicimos un partido malo, nos costó la eliminación en la Champions, y de la forma como la perdimos ,y ya llegamos con sensaciones que no eran buenas a la final de Copa, aunque éramos campeones de Liga”. 

¿Intocable?

Sobre la competencia que se avecina que tendrá la próxima temporada, el uruguayo tiene claro cuál es su rol y las obligaciones que supone jugar en el Barça: “Uno tiene que asumir el rol, los años y lo que le va rindiendo al club. Yo ya dije que un jugador del Barça tiene que estar preparado para la competencia y para que le traigan un compañero que te pueda suplantar en algunos momentos” y añadió: “Asumo mi responsabilidad porque tengo 32 años y voy a cumplir 33, para mi sería un sueño poder acabar la carrera en el Barça, donde estoy feliz y contento, pero nunca se sabe y no depende sólo de mí, sino también del club”.