Avanzan las negociaciones, pero se estancan en el mismo punto: el precio. Las reuniones entre dirigentes valencianos y azulgranas han sido continuas estos días y este lunes Mateu Alemany, director general del Valencia, estuvo en la capital catalana para acercar posturas entre dos clubes que históricamente se han entendido en materia de fichajes.
Ambos tienen necesidades deportivas similares, pero también económicas. Marcelino ha pedido refuerzos para la temporada que viene y parece ser que los ha encontrado en el Camp Nou. El club ché preguntó por Denis Suárez, Rafinha y Cillessen --todos en la rampa de salida del Barça-- pero sorprendieron especialmente las informaciones que apuntan a un posible trueque de cancerberos.
La operación interesa especialmente al Barça en lo que a guardametas se refiere. Neto cuenta con experiencia en Champions, Copa y Liga y ha militado en equipos de altísima exigencia, como la Juventus, pese a ser el portero suplente. El intercambio del holandés por el brasileño parece una jugada perfecta, pero las negociaciones no encuentran un acuerdo definitivo.
Mismas necesidades
Mientras ambos porteros han accedido a cambiar de aires, la cifra es lo que mantiene la negociación sin cerrar. Cillessen tiene claro que necesita salir de la capital catalana si quiere ser el portero titular. Neto, por su parte, tenía la misma prioridad antes de que el Barça se interpusiera en su camino pero prefiere sacrificar su puesto por estar en un club que aspira a todo.
Su fichaje le relegaría a la suplencia en Liga y Champions, pero parece ser que el banquillo azulgrana le seduce y le convence más que la posible titularidad en Mestalla, dada la irrupción de Jaume Doménech. El problema es la cifra. Cillessen está tasado, a sus 30 años, en 25 millones de euros mientras que Neto, a sus 29, ostenta la misma cifra.
Una foto de Neto, durante un partido con el Valencia / EFE
El gran problema es que ambos clubs necesitan capital urgentemente antes del 30 de junio para cuadrar sus cuentas. Las negociaciones están muy avanzadas, pero ninguno quiere abonar más que el otro. Ambos quieren cobrar y ambos quieren pagar a partir del 1 de julio para que compute para la próxima temporada.
El Valencia, por su parte juega con ventaja. Tan solo necesita 30 millones de euros para cuadrar las cuentas. La venta de Neto antes del 30 de junio permitiría al club ché ingresar dicha cantidad y fichar a Cillessen por el mismo importe se incluiría en el presupuesto de la temporada 2019-2020. Un escenario que no tiene el Barça que necesita cerca de 70 millones de euros.