Philippe Coutinho es otro bajo la protección y tranquilidad que le da la seleçao. Sin críticas, sin focos mediáticos y sin presión añadida, el carioca se siente, y nunca mejor dicho, como en casa. Es uno de los mejores jugadores del conjunto de Tite y uno de los referentes futbolísticos del equipo.
Si antes del inicio de la competición su figura se antojaba como capital para la consecución del título, la lesión de Neymar Jr. ante Catar le ha colocado en una escenario de liderazgo absoluto. El juego y la responsabilidad de la victoria pasan, en gran parte, por su botas y vestido con la canarinha no parece suponerle un problema.
Es un líder, como también lo es Arturo Vidal en uno de los rivales de esta Copa América con la elástica de Chile. Mientras el chileno llega con la confianza plena tras su buena temporada en el Barça y la que le da también de por sí su carácter y su rol en la Roja, Coutinho se desquita paulatinamente de los complejos con la canarinha. Victoria ante Bolivia para coger sensaciones.
Piropos para un compañero
Y mientras Coutinho se gusta en la selección, también tuvo tiempo para destacar las virtudes de Vidal: "Arturo es un grandísimo jugador, un gran amigo. Yo lo vi muy bien este año. Entrena mucho para poder mejorar", explicó el mediapunta. Unas declaraciones que llegaron a sonar a halago y de las que algunos culés tendrán dudas: "Claro que tiene ADN Barça. Él se adaptó muy bien ahí. Por eso a todos los equipos les gusta mucho la forma en que juega y la manera de ser dentro del vestuario".
Coutinho, Messi, Jordi Alba y Arturo Vidal celebran el primer tanto del FC Barcelona en Sevilla / INSTAGRAM
Un ADN más destructivo, pero que el brasileño entiende que igualmente necesario tanto en el verde como en el vestuario: "Es muy importante para el equipo. Es un guerrero, un luchador. Tiene mucha garra y en todos los partidos se puede ver cómo lucha", sentenció. Una alabanza que podría cruzarse en el camino de Coutinho si ambas selecciones pasan de ronda.