No le gusta, pero el mercado abre un abanico de posibilidades a las que Ernesto Valverde deberá adaptarse si se dan. El Txingurri contará con nuevas caras a partir del 14 de julio --fecha en la que arranca la pretemporada-- pero también se irá despojando de otros jugadores que el club pretende vender.
Salidas y entradas para mejorar la plantilla y cuadrar las cuentas, en las que gran parte de la atención del club y el staff técnico se centran en Ivan Rakitic. El Txingurri tiene claro que el croata es una de sus piezas fundamentales en el terreno de juego y una extensión de su persona en el verde, pero el escenario que planea sobre el Barça no le asegura su continuidad.
En una reunión que mantuvieron Valverde y la dirección deportiva, el técnico extremeño dejó clara su postura, ratificada por enésima vez, de su opinión sobre el centrocampista: es intocable. Pero a su vez entendió la postura del club. El croata tiene un cartel internacional envidiable y su venta podría suponer un ingreso de capital importante irrechazable para el club.
La condición
Valverde prefiere que siga, pero ha cedido. Entiende que si llega una oferta irrechazable el Barça deberá escuchas ofertas. Una opción que también le trasladó en otro encuentro Bartomeu. Se barajaron las posibles entradas y salidas en una lista considerable de los jugadores mejor tasados del mercado. La única condición a salida del croata, pese a la llegada de De Jong, es que venga acompañada del fichaje de otro jugador de las mismas garantías.
Una foto de Ernesto Valverde e Ivan Rakitic durante un partido del Barça en el Camp Nou / Twitter
Asimismo, también dejó claro quienes quieren que sigan de los que están en la rampa de salida. Una lista de la que destacó, sorprendentemente, el nombre de Todibo. El entrenador azulgrana lo quiere ver como mínimo en pretemporada y pese a ser uno de las posibles salidas, la situación con De Ligt podría permitirle continuar.