Matthijs de Ligt Antoine Griezmann son las dos grandes prioridades del FC Barcelona de cara a la próxima temporada, pero no son los únicos futbolistas que podrían reforzar la plantilla. El club catalán también busca un lateral izquierdo que pueda competir con Jordi Alba por un puesto en el once y un portero en caso de que salga Jasper Cillessen.

Además, también está sobre la mesa la posible llegada de Juan Mata, cuyo contrato con el Manchester United finaliza el próximo 30 de junio. Por ahora no hay nada cerrado, pero tal y como informó Culemanía miembros de la entidad azulgrana se reunieron con el padre y agente del burgalés hasta en dos ocasiones para valorar su posible incorporación.

Juan Mata aplaudiendo a la afición de Old Trafford / EFE

Juan Mata aplaudiendo a la afición de Old Trafford / EFE

El exfutbolista del Valencia gusta en la secretaría técnica siempre y cuando sus pretensiones económicas no sean demasiado elevadas. El centrocampista tiene una ficha de cinco millones de euros netos en Old Trafford (casi 10 millones brutos), una cifra que no debería subir si, como es el caso, quiere vestir de azulgrana.

Otro Arturo Vidal

En caso de acometer el fichaje de Juan Mata, el FC Barcelona adquiriría un segundo Arturo Vidal. No tanto por aptitudes sino por actitudes y mentalidad sobre el terreno de juego. El burgalés derrocha talento y juega en posiciones más ofensivas, mientras que el chileno es un jugador de corte más defensivo cuyas virtudes se acentúan cuando el club catalán no tiene el balón.

Obviando sus respectivas labores sobre el tapete, Mata Vidal guardan más similitudes de lo que podría parecer. Para empezar, su bajo coste económico: el español llegaría gratis y el chileno costó solo 18 millones de euros. El burgalés tiene 31 años (por los 32 de Vidal) y, como el ex del Bayern, aportaría veteranía y experiencia, imprescindible en los duelos más importantes. 

Una foto de Arturo Vidal durante un entrenamiento del Barça / FCB

Una foto de Arturo Vidal durante un entrenamiento del Barça / FCB

Además, el aún futbolista del Manchester United tendría claro su rol desde el primer momento: no llegaría para ser un fijo en el once, sino para ayudar al equipo y dar descanso a los teóricos titulares en determinados encuentros. A Vidal le costó aceptarlo pero lo acabó haciendo. Mata vendría siendo consciente de su papel.

Polivalencia

El burgalés tiene una característica que llama la atención del FC Barcelona: su polivalencia. Aunque se siente más cómodo en la banda derecha del ataque, puede actuar también en el flanco izquierdo o en la posición más avanzada del centro del campo. No tiene el desequilibrio de antaño pero sigue leyendo el juego a la perfección.

Mata gusta, pero la realidad es que actualmente el club azulgrana tiene otras prioridades. La entidad desea cerrar los fichajes de Matthijs de Ligt Antoine Griezmann cuanto antes y luego ya podrá centrar sus esfuerzos en incorporaciones complementarias como sería la del futbolista burgalés.