El último problema del Barça para cerrar el fichaje de De Ligt (y el jugador, en Barcelona)

A falta de disputar la final de la Copa del Rey que se celebrará el próximo sábado 25 de mayo en el Benito Villamarín, el FC Barcelona ya está trabajando en la planificación de la próxima temporada. La entidad catalana tiene actualmente una prioridad, y no es otra que cerrar cuanto antes el fichaje de Matthijs de Ligt.

A sus 19 años, el central se ha convertido en uno de los mejores de Europa. Su gran temporada capitaneando al Ajax, la gran revelación de la Champions League, lo ha puesto en el escaparate. Clubes como Juventus de Turín, París Saint-Germain y Bayern de Múnich, con defensas muy veteranas, persiguen su fichaje.

Y presionan al jugador, que tiene claro que quiere vestir de azulgrana junto a su compañero y compatriota Frenkie de Jong. El acuerdo del FC Barcelona con De Ligt y su club de origen es total, y ahora solo debe convencer a Mino Raiola, representante del futbolista, que tiene unas exigencias económicas muy elevadas.

Casi 10 millones

Según informó el periodista Miguel Rico en Mundo Deportivo, el italiano reclama entre 8 y 10 millones de euros en concepto de intermediario y el club catalán no está por la labor de pagar lo que pide el agente. La cifra que solicita el representante superaría, por ejemplo, el posible salario de De Ligt con el FC Barcelona.

Imagen de archivo de Mino Raiola / EFE

Imagen de archivo de Mino Raiola / EFE

Mientras los azulgrana rehúsan satisfacer a Raiola, los clubes que persiguen el fichaje de De Ligt (los mencionados Bayern, PSG y Juventus) no tendrían ningún problema en realizar ese pago. Pese a ello, la entidad culé confía en que la voluntad del jugador se imponga a la de su representante y acabe jugando en el Camp Nou la próxima temporada.

En Barcelona

Mientras el Barça intenta cerrar su fichaje, De Ligt, De Jong y sus compañeros del Ajax aterrizaron en Barcelona la noche del pasado viernes para celebrar la consecución de la Eredivisie y la Copa de Holanda. Los holandeses llegaron en un vuelo privado procedente de Amsterdam que duró más de dos horas.

Como no podía ser de otra manera, su presencia en la capital catalana, aunque sea por un motivo lúdico, ha despertado una gran expectación. Los futbolistas estarán en Barcelona durante unos tres días acompañados de sus familiares.