Antoine Griezmann es el elegido para ser el fichaje estrella de la próxima temporada en el Camp Nou. Ni su negativa de la temporada pasada ni su insuficiente temporada en el Atlético de Madrid han tachado al futbolista de la lista de futuribles. Lo intentó una última vez en Madrid y tras el fiasco liguero, copero y europeo, el Barça es su primera opción.
El francés anunció su salida del Atlético de Madrid este martes tras reunirse con el Cholo Simeone y otros dirigentes de la entidad rojiblanca, y con su futuro en el aire, hasta el 1 de junio cuando su cláusula de rescisión desciende a 120 millones de euros --ahora está fijada en 200 millones-- no se conocerá su nuevo equipo, pero todo parece atado.
El batacazo en Champions del Barça también ha ayudado a reabrirle unas puertas que estaban cerradas a principio de temporada y que ha sido el propio capitán, Leo Messi, quien se ha encargado de aceptar esa posibilidad.
Contacto directo
Durante la reunión que mantuvo el ariete galo con Simeone, Gil Marín y Andrea Berta, el francés expuso los motivos de su salida del club colchonero y entre una de sus alegaciones, según reveló el periodista Roberto Gómez en el programa La Ronda de Radio Marca, espetó: "Yo a Leo no le puedo decir que no". Unas declaraciones que apuntan a que ha existido una conversación entre los dos jugadores para convencer al francés de cambiar el Wanda por el Camp Nou.
Griezmann y Messi disputan un balón en el Atlético de Madrid-Barça de la primera vuelta / EFE
Una nueva intervención del capitán, como también ocurrió con Frenkie de Jong en invierno, para convencer a un jugador que considera que aumentará la calidad y competitividad del equipo la próxima temporada para lograr el sueño de la Champions. Asimismo, el entorno del jugador habría recibido el beneplácito del vestuario a su incorporación a través de personas de confianza de Gerard Piqué, con quien ya mantuvo contacto la temporada pasada para rodar su documental sobre La Decisión.