Inverosímil, peor real. La eliminación del Barça en Anfield a las puertas de la final de la Champions League ha hundido al barcelonismo en el sueño del tercer triplete de la historia azulgrana. Muchos señalados, otros sentenciados y una afición dolida por un error del que todos estaban avisados tras la debacle de Roma la temporada pasada.
Tras el pitido final de Anfield, Valverde dio dos días de descanso a la plantilla para meditar sobre el asunto y mientras algunos optaron por quedarse en sus casas, otros decidieron alejarse de los focos y encontrar consuelo en el cariño de sus familias. Sin publicaciones en redes sociales y sin declaraciones de ninguna índole. Todos de luto, excepto uno: Ivan Rakitic.
El croata fue uno de los más señalados en tierras inglesas con un partido muy discreto y muy alejado de su nivel habitual, pero el croata decidió acudir a Sevilla junto a su mujer para ver a sus más allegados. Una visita que también aprovechó tpara pasear por la Feria de Abril que se celebra estos días en la capital andaluza.
Enfado monumental
El centrocampista se hizo eco de su presencia en Andalucía a través de las redes sociales, un viaje que no ha gustado en el seno del club y de la afición y que llevó el viernes por la noche, después de que toda la plantilla volviera a los entrenamientos, a que un grupo de radicales de los Boixos Nois se personara en el domicilio del jugador.
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El grupo pertenece a Los Cachorros, según informa el AS, a los que el jugador atendió a las puertas de su casa y con los que charló durante unos minutos. Los presentes reprocharon al jugador su fugaz escapada a Sevilla en unos momentos difíciles para el barcelonismo, algo que el jugador aseguró que fue por motivos personales y que nunca quiso faltarle el respto al club ni a la afición. Asimismo, aseguró que cuando se enteró que una fotografía suya circulaba por redes sociales fue él mismo quien pidió que se eliminara.
Unas explicaciones que convencieron a los radicales y que pidieron al croata un mayor compromiso en lo que resta de temporada, especialmente en la final de la Copa del Rey, así como una mejor actitud.