Tristeza, decepción, falta de palabras, abatimiento... Los jugadores del Barça, como la afición, quedaron destrozados tras caer eliminados en la Champions League. Sin respuestas para la prensa porque ni ellos mismos las tienen.
Pese al desastre, algunos jugadores decidieron salir a dar la cara. No lo hizo el capitán, Leo Messi, pero sí aparecieron hombres de peso como Luis Suárez y Sergio Busquets para poner voz a la decepción.
Esto dijo Suárez en zona mixta: "Estoy triste. Tenemos que hacer mucha autocrítica porque no nos puede pasar esto dos años seguidos. Tenemos que reprocharnos muchas cosas".
El futbolista uruguayo descarta culpar a Valverde: "Los que jugamos somos los jugadores, al entrenador no hay que reprocharle nada. Hay que pedir perdón. Estamos en el Barcelona, no puede ser que te marquen dos goles en dos minutos y un cuarto gol de juveniles".
"Estamos muy dolidos, somo seres humanos que sentimos el dolor, toca hacer autocrítica, poner el pecho a la bala y ser conscientes de que somos profesionales y tenemos que estar preparados para las críticas", zanjó el mejor socio de Messi.
Busquets se moja menos
Busquets también salió a la zona mixta de Anfield y comentó las críticas de Suárez: "Han sido muchas cosas, pero ahora no es momento para hacer valoraciones negativas porque ya bastante dolidos estamos nosotros... somos culpables, porque somos los que hemos jugado... es muy duro".
"Aquí somos un equipo para lo bueno y para lo malo y no hay que señalar a nadie", destacó el centrocampista azulgrana, antes de buscar una brizna de esperanza en lo que queda, un consuelo estéril: "Esto va a doler bastante y no se va a olvidar en mucho tiempo... lo bueno es que el fútbol siempre da oportunidades... tenemos una final de Copa, tenemos que seguir y acabar la Liga de la mejor manera posible".
Busquets no rehusó comparar la noche de Anfield con la de Roma: "Han sido dos noches muy duras, diferentes pero que acabaron muy mal, con la eliminación".