Malcom Oliveira está centrado, pero no olvida que su futuro la próxima temporada podría estar lejos del Camp Nou. El brasileño no ha contado con grandes oportunidades esta temporada y a sus 21 años necesita continuidad para consolidarse como el futbolista que espera ser.
Salió del Girondins para cumplir su sueño de azulgrana. Un sueño que mantiene vivo, pero que podría dinamitar la llegada de otro delantero al club catalán y que cerraría, casi por completo, sus posibilidades en la delantera. Un escenario incierto que a falta de concretarse están utilizando algunos clubs de la Premier y la Serie A para seducir al delantero. Llegó por 41 millones de euros y no saldrá por un precio menor, pero es una cifra que algunos equipos están dispuestos a pagar.
Con contrato vigente hasta 2023, el que para Valverde siempre ha sido un fichaje de club, pese a responder notablemente cuando se le ha dado la oportunidad, podría ser un fichaje de entrenador para otros técnicos.
Italia y la Premier
Su velocidad, técnica y juventud auguran a un gran delantero de futuro. Hasta la fecha solo ha jugador en 19 partidos, muchos con minutos residuales, que han frustrado a un jugador que no quiere escuchar ofertas hasta final de temporada, pero que sí atienden sus agentes. La Roma, a quien le arrebató su fichaje el Barça en último momento, el Inter o el Milan se han interesado por el jugador.
Este último tiene especial interés. El equipo rossonero quiere volver a dominar Europa y ello pasa por reorganizar la plantilla en un año de transición visto que entrar en Champions la temporada que viene está especialmente difícil.
Una foto de Malcom durante el partido contra el Rayo Vallecano / EFE
La Serie A gusta al carioca, pero la Premier le tienta con fuerza. Conjuntos como el Tottenham o el Arsenal estarían dispuestos a igualar la cifra que abonó el club azulgrana por hacerse con el futbolista y su fútbol encaja mejor en una liga basada en la velocidad y el físico. Aun así, spurs y gunners también tienen contradicciones. Tienen delanteras muy consolidadas y hacerse un hueco también sería difícil.
Malcom tiene pretendientes de sobras para elegir el destino que más le convenga, si finalmente decide, que el Camp Nou no favorece a sus intereses. Valverde deberá ser claro con el futbolista para que tome una decisión final.