El FC Barcelona quiere la Liga con mucha fuerza. El 26º título liguero de la historia del club será una realidad muy pronto. Y tanto en el vestuario como en el club ya le han puesto fecha límite: el sábado.
Pase lo que pase, la consecución de la Liga no se postergará a la semana que viene. Otro debate es cuando es más conveniente ganarla, pero sin lugar a dudas que no pasará del sábado.
Los jugadores están animados, ilusionados y concienzados de que debe lograrse el objetivo cuanto antes. Y una vez conquistado, futbolistas y cuerpo técnico se centrarán al ciento por ciento en la Champions League, donde espera una férrea eliminatoria contra el Liverpool.
Con ganas a por el Levante
En el vestuario se propusieron cerrarla esta semana y han superado las dos pruebas más difíciles: ganar a la Real Sociedad, que costó sudor y perder la posesión, y al Alavés en Mendizorrotza. Cumplidos los objetivos más importantes ya solo falta una tercera victoria ante el Levante.
Los azulgranas les tienen ganas a los granotas porque todavía no han encajado la denuncia, estéril pero incómoda, por alineación indebida de Chumi en Copa. Ello sumado al hecho de que pueden ganar la Liga le da un mayor atractivo al encuentro. Y no tendrán piedad.
Una foto de Leo Messi en el banquillo de Mendizorroza / EFE
Hasta el punto de que Leo Messi decidió descansar contra el Alavés, cuando todo hacía pensar que lo aconsejable era descansar el sábado, para participar contra el Levante. Los grandes quieren estar sobre el terreno de juego el día que se conquiste la Liga.
La conjura del vestuario
En el club son conscientes de que la Liga puede llegar antes. Podría caer, por ejemplo, este miércoles si el Atlético no es capaz de ganar al Valencia. Podría caer el sábado antes de jugar si el Atlético no es capaz de vencer al Valladolid. Pero sin duda, en caso de que los rojiblancos ganen esos dos partidos, la Liga cerá el sábado a última hora de la noche. Los cracks así lo han decidido.
La conjura es total y no se andarán con chiquitas. El Barça saldrá a destrozar al Levante con todo y a demostrar que el equipo está en plenas condiciones para recibir al Liverpool, al que quieren empezar a intimidar cuanto antes. Este sábado se canta el alirón.