El Barça está a punto de cantar el alirón. Una derrota este miércoles del Atlético de Madrid contra el Valencia sería la sentencia a una Liga que ya se hace larga. Los culés tienen otros objetivos a estas alturas: estar el dos de junio en el Wanda Metropolitano en la final de la Champions League y levantar el triplete.
Ernesto Valverde firmaría su segundo título de liga consecutivo. El extremeño ha sabido compensar el equipo en los momentos más complicados y llegar vivo al tramo final de las tres principales competiciones. En la Liga se ha demostrado que el equipo va con paso firme para levantar el triplete.
El dato demoledor
El Txingurri llegó al banquillo del Barça en verano del 2017. Su propuesta de fútbol encajaba a la perfección con el sistema culé y su manera de hacer -partido a partido- ha sido muy beneficioso para conseguir el título liguero sin ningún susto de última hora.
Ernesto Valverde gana la partida a Simeone en el Barça-Atlético / EFE
El curso pasado casi se firma la gesta de terminar la temporada sin haber perdido un partido en la competición regular. Finalmente se pinchó en Levante (4-3), la única derrota, con la Liga en el bolsillo. Esta temporada se han firmado solamente dos derrotas: contra el Betis (3-4) y contra el Leganés (2-1).
Los números hablan por sí solos. Tres derrotas en 72 partidos disputados, unos números muy difícil de superarlos. Del total de encuentros, 52 han sido victorias, 17 empates y solo tres derrotas. Un dato que duele mucho en la capital. Valverde seguirá la próxima temporada en el banquillo para intentar firmar de nuevo otra Liga intratable.