Leo Messi tiene entre ceja y ceja "esa copita linda". El argentino prometió en el Trofeu Joan Gamper que la Champions League volvería a Barcelona cuatro años después y nadie está esforzándose más que él para que eso se convierta en realidad. Esta temporada ha marcado ocho goles en siete encuentros y es el máximo anotador de la competición.
Dio un recital ante el PSV Eindhoven en el primer partido de los azulgrana en la competición. Volvió a exhibirse en Wembley, donde el FC Barcelona logró una gran victoria ante el Tottenham (2-4). La lesión en el antebrazo le privó de jugar contra el Inter, pero en el segundo duelo frente al PSV volvió a marcar y selló el pase de los catalanes como primeros de grupo.
Leo Messi celebra su gol ante el Tottenham / EFE
Contra el Olympique de Lyon fue quien más insistió (sin premio) en el partido de ida y el que decidió el encuentro de vuelta. Abrió la lata desde el punto de penalti (1-0) y puso tierra de por medio cuando el conjunto francés estaba a un solo tanto de remontar la eliminatoria (3-1). Además, dio las asistencias del cuarto y quinto gol culés.
Vuelve el tormento
Todo iba sobre ruedas hasta que llegaron los cuartos de final, una ronda maldita para Leo Messi (y para el FC Barcelona). El argentino no marca en ella desde el 2 de abril del 2013 ante el París Saint-Germain. Con el partido del pasado miércoles en Old Trafford ya van doce encuentros de cuartos de final sin que el argentino vea puerta.
Es innegable que su mala racha tiene mucho que ver con las últimas tres eliminaciones del conjunto azulgrana en esta ronda. El 10 es el referente, el futbolista que hace que el engranaje funcione. Si él no está a su mejor nivel, el FC Barcelona tampoco. Y eso se ha notado en las últimas tres temporadas en las que el club catalán no ha dado la talla.
Parecía que sí
Parecía que esta nefasta racha se podía romper el pasado miércoles en Old Trafford. Leo Messi tuvo mucha incidencia en el inicio del encuentro, se movió por toda la zona de ataque y puso el centro para que Suárez cabeceara en el primer gol de los catalanes. El argentino estaba siendo el mejor del encuentro hasta que se topó con Smalling.
Una foto de Leo Messi sangrando de la nariz tras el golpe de Smalling / EFE
En el 30', el central se llevó por delante al 10, que empezó a sangrar por la nariz. Aunque no sufrió ninguna lesión grave, Ernesto Valverde explicó que Messi no pudo rendir a su mejor nivel por la conmoción que le había provocado el golpe. Fue Suárez el verdadero héroe de la victoria azulgrana en Old Trafford.
Las estadísticas están para romperlas
En la rueda de prensa previa al partido frente al Manchester United, Ernesto Valverde le quitó importancia a esta racha que atraviesa Leo Messi: "La estadística está bien, refleja el pasado pero no habla de lo que puede pasar en el futuro. Y no sabemos lo que puede pasar mañana".
El próximo martes Messi tiene una nueva oportunidad para romper su mala racha. Como indicó el Txingurri, el pasado es pasado y el duelo frente al Manchester United puede significar el fin de un gafe que arrastra durante más de seis años.