Luis Suárez volvió a brillar y volvió a reencontrarse con el gol este domingo ante el Betis. Aportó su granito de arena para la goleada azulgrana al conjunto de Quique Setién y confirmó de nuevo su mejor estado de forma en una faceta que se le reconoce poco: la de asistente.
Una faceta que ha desarrollado a la perfección en las últimas semanas para encontrar a su mejor socio, Leo Messi, y que este domingo escenificó de la mejor manera: taconazo para poner en bandeja el segundo tanto de la noche al argentino. Marca menos, pero genera mucho más juego para el bien del colectivo y sigue siendo una pesadilla para los centrales.
Fiable en sus métodos
Ante el Betis, se coció el mismo un gol en el que dejó por el camino hasta cuatro defensas verdiblancos para batir a Pau López por el palo izquierdo. Un tanto para coger confianza y para certificar una estadística que destaca su predilección y confianza en su pierna derecha. Lo intentó en distintas ocasiones, pero la pulir la definición con la zurda es una asignatura pendiente para el charrúa.
El gol no llegó hasta que pudo acomodarse el balón en su pierna 'buena', mientras que anteriormente erró los tres disparos que chutó con la zurda. Hasta la fecha lleva un total de 18 goles en el campeonato doméstico, de los cuáles ha marcado 14 con la derecha, frente a cuatro con la izquierda.
Una foto de Luis Suárez durante el partido ante el Betis / FCB
Asimismo, continúa siendo el segundo máximo goleador de la liga, solo por detrás de Leo. Mantiene su olfato intacto y ahora deberá darle continuidad en Champions, especialmente fuera de casa donde lleva sin marcar desde el 16 de septiembre de 2015 en el Olímpico de Roma.
Su lesión sufrida ante el Betis no hace peligrar el duelo ante el Manchester United del 10 de abril. El urguayo estará de 10 a 15 días de baja y podrá también, a priori, sentenciar la Liga ante el Atlético de Madrid en el Camp Nou.