La temporada futbolística entra en el tramo decisivo pero desde la secretaría técnica del FC Barcelona ya piensan de qué manera se puede mejorar al equipo de cara al siguiente curso. Jean-Clair Todibo y Frenkie de Jong ya están atados, pero no serán los únicos futbolistas en llegar a la disciplina catalana el próximo verano.
Uno de los fichajes más prioritarios es el del delantero centro, pues Luis Suárez tiene 32 años y se antoja clave incorporar a su futuro relevo cuánto antes. El elegido es Luka Jovic, delantero del Eintracht de Frankfurt que ha anotado 15 goles en 23 partidos en la Bundesliga. A sus 21 años, está peleando por el 'pichichi' de la competición alemana con Robert Lewandowski.
El pasado jueves, su equipo se jugaba el pase a cuartos de final de la Europa League ante el Inter de Milán en el Giuseppe Meazza. Hasta allí se desplazaron Éric Abidal, Ramon Planes y Pep Segura para observar al joven serbio, y las sensaciones no pudieron ser más positivas. Jovic anotó el gol de la victoria del Eintracht y clasificó a los alemanes para la siguiente ronda.
De Ligt, el central del futuro
Como ya reconoció el presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, a Culemanía, otro de los objetivos del club azulgrana de cara al siguiente verano es el fichaje de Matthijs de Ligt. El central, al que ya pretendía media Europa, aumentó su cotización después de la gran eliminatoria que cuajó contra el Real Madrid en octavos de final de la Champions League.
Matthijs de Ligt celebrando un gol / EFE
El fichaje del zaguero costaría a la entidad catalana unos 70 millones de euros. Un precio alto, pero teniendo en cuenta que es uno de los defensas con más proyección de Europa, podría llegar a rentabilizarlo. Es un futbolista que puede dominar la próxima década y tanto el FC Barcelona como el resto de Europa lo saben.
El sustituto de Jordi Alba
La entidad catalana necesita reforzar también la posición del lateral izquierdo. Si bien Jordi Alba es incombustible, no tiene un sustituto en la primera plantilla que pueda darle descanso cuando lo necesita. El futbolista del filial, Juan Miranda, no cuenta con la confianza de Ernesto Valverde, así que el Barça deberá buscar fuera lo que no tiene en casa.
Una foto de Jordi Alba durante un entrenamiento del Barça / EFE
A diferencia del central y el delantero centro, en el carril zurdo aún no hay un elegido. Teniendo en cuenta que las incorporaciones del zaguero y el 9 saldrán caras, se pretende realizar un fichaje económico. Un futbolista del perfil de Filipe Luis, veterano y con experiencia en la Liga, podría ser una gran opción.
Dos incógnitas
Hay dos futbolistas en la actual plantilla cuyos futuros aún no están claros. Uno de los casos es el de Ivan Rakitic. El croata, si bien es una debilidad de Valverde, podría salir para aportar liquidez a las arcas del club azulgrana, sin demasiados fondos tras el fichaje de De Jong. En caso de que el exsevillista acabara haciendo las maletas, la incorporación de Adrien Rabiot, que queda libre el próximo verano, tomaría fuerza.
Philippe Coutinho está entre la espada y la pared. El FC Barcelona pagó por él 135 millones de euros hace algo más de un año y no está rindiendo al nivel que se esperaba. Dembelé (cuando está bien físicamente) le ha quitado la titularidad, así que el brasileño podría salir el próximo verano antes de que su valor de mercado se devalúe aún más.
Una foto de Philippe Coutinho durante el partido contra el Olympique de Lyon / EFE
En caso de que el 7 se marchara, se abrirían las puertas para Nicolás Pepé, delantero del LOSC Lille que puede jugar en las tres posiciones del ataque. El costamarfileño ha anotado 17 goles en la Ligue 1 (solo Mbappé ha marcado más) y no para de recibir halagos. El último, de su compatriota Didier Drogba, quien calificó a Pepé como "rápido, completo y eficaz. Hacen falta jugadores como él en Francia".
A falta de saber qué pasará con el Barça del presente en los terrenos de juego, el del futuro ya empieza a tomar forma en los despachos. Habrá, como mínimo, tres incorporaciones. Dependiendo de las salidas, podrían llegar hasta cinco caras nuevas.