El Camp Nou silbó por enésima vez el himno de la Champions

Volvía la Champions League al Camp Nou. El último encuentro fue en noviembre contra el Tottenham con la primera plaza de grupo certificada, pero a los más de 90.000 aficionados no les importó la nostalgia que ofrece la competición europea de noviembre a febrero.

La competición más importante para el club y el equipo esta temporada fue recibida con una sonora y monumental pitada, por enésima vez, mientras las cámaras de televisión enfocaban los rostros de los jugadores.

Duró de principio a fin y tuvo especial ímpetu cuando sonó el estribillo. Un estadio lleno de cabo a rabo que sigue sin perdonar las multas impuestas por la UEFA por la presencia de estaladas y mensajes políticos en algunos partidos intercontinentales donde consiguen mayor eco internacional. 

Libertad de expresión total

Una sanción que volverá a repetirse ya que la segunda gradería mostró una pancarta en inglés con el lema traducido: "La autodeterminación es un derecho, no un crimen" para defender a los políticos presos que viven el juicio del procés desde hace semanas ante el Tribunal Supremo. 

Bartomeu tampoco está por la labor de poner fin a dichos simbolismos político. La libertad de expresión, sea cual sea la ideología política, o de otra temática, es innegociable en feudo azulgrana.