Hasta el momento, la semana del FC Barcelona es inmejorable. El miercóles logró la clasificación para la final de Copa tras vencer al Real Madrid en el Santiago Bernabéu (0-3) y el jueves se hizo oficial la renovación de Jordi Alba hasta 2024. El anterior contrato del de l'Hospitalet vencía en junio de 2020.
Es una gran noticia para todos los aficionados azulgrana. Llegó al Camp Nou en verano de 2012 y le costó muy poco convertirse en un jugador importante. Pero ha sido con Ernesto Valverde en el banquillo cuando se ha vuelto imprescindible. Su verticalidad por el carril izquierdo y su conexión con Messi hacen mucho daño a los equipos rivales.
La prolongación de su contrato privará que los jugadores que estaban en la agenda del club para ocupar el lateral izquierdo acaben vistiéndose de azulgrana. No porque hayan dejado de interesar, sino porque tienen un caché demasiado elevado como para esperar oportunidades desde el banquillo. Es el caso de Ferland Mendy, que figuraba en la primera posición de todas las listas.
Un lateral muy cotizado
El francés tiene a media Europa detrás gracias a la gran campaña que está realizando con el Olympique de Lyon. Es una pieza clave en los esquemas de Bruno Genesio: ha sido titular en 31 encuentros y en otros cuatro ha partido desde el banquillo. Sus números son bastante buenos teniendo en cuenta que se trata de un lateral: ha marcado tres goles y ha repartido tres asistencias.
Ferland Mendy en acción durante un partido del Olympique de Lyon / EFE
Es un futbolista que tiene en el físico su mayor virtud. Es férreo en defensa y tiene mucha participación en el juego de ataque del conjunto lionés. Sus constantes incorporaciones son una amenaza para el equipo rival, como ya pudo comprobar el FC Barcelona en el encuentro de ida de octavos de final de la Champions League.
Las puertas de Mendy se cerraron no porque al conjunto azulgrana no le interese, sino porque su cotización en el mercado es muy alta y no aceptará fichar por un equipo en el que estaría relegado a la suplencia la gran mayoría de partidos. Eso no quiere decir que el Barça no siga buscando un suplente para Jordi Alba.
Sin relevo en el primer equipo
El de L'Hospitalet no se ha convertido en imprescindible solo gracias a sus grandes actuaciones. También ha ayudado el hecho de que en el primer equipo no haya otro lateral izquierdo. El pasado verano se marchó Digne y la directiva azulgrana confió en la progresión del canterano Juan Miranda, al que Valverde no le ha dado las oportunidades suficientes.
Juan Miranda durante el partido frente al Tottenham / EFE
La juventud del andaluz (19 años) invita a pensar que tendrá tiempo para hacerse valer, pero para no tomar los riesgos que se tomaron en esta campaña, la directiva azulgrana ya está buscando otro lateral en el mercado. El retorno de Cucurella es una opción, como lo es la incorporación de un lateral con experiencia en la Liga.
Además, no hay que cerrar la puerta a la llegada de un lateral joven. Jordi Alba finalizará su contrato cuando tenga 34 años y, en caso de que el rendimiento de Miranda no fuese suficiente, el FC Barcelona debería buscar a un futbolista que pueda progresar con el paso del tiempo. En un momento u otro del próximo lustro, Alba dirá "basta".