La calma de Arturo Vidal que precede a la tormenta

Arturo Vidal no pasa por su mejor momento desde que llegó a la disciplina del FC Barcelona. En noviembre y diciembre se convirtió en un futbolista clave para Ernesto Valverde, pero su mal rendimiento durante el mes de enero lo relegó al banquillo más veces de las que hubiera deseado.

Fue suplente en partidos tan importantes como la vuelta de cuartos de final de Copa del Rey ante el Sevilla o el clásico copero del pasado 6 de febrero, aunque en esos casos tuvo bastante importancia el gran rendimiento que estaba dando Arthur. Con la lesión en el bíceps femoral del brasileño parecía que Vidal sería el encargado de sustituirlo. Y así fue hasta el partido de Lyon.

Sergi Roberto titular

El ex del Bayern de Múnich había formado parte del once inicial en los dos partidos previos, pero contra todo pronóstico Valverde prefirió optar por el canterano en el duelo contra el cuadro francés. No lo explicitó en redes, pero fue una suplencia que no gustó nada al futbolista chileno.

Sergi Roberto en acción durante el partido contra el Olympique de Lyon / EFE

Sergi Roberto no jugaba en la posición de interior desde principios de temporada. Ahí actuó en los encuentros ante el Alavés (Jornada 1), y la Real Sociedad (Jornada 4). También jugó por delante de Semedo en el partido del Wanda Metropolitano, pero en ese caso el Barça formó con cuatro centrocampistas.

Su titularidad fue una sorpresa, pues pese a conocer la debilidad que tiene el Txingurri por él, parecía más lógico apostar por Arturo Vidal. En el Parc OL rindieron a buen nivel tanto él como Nelson Semedo, de manera que no parece descabellado que el técnico pueda repetir esa apuesta hasta que regrese Arthur.

Arturo se contiene

Aunque no dijo nada tras el partido ante el Olympique de Lyon como hizo tras las suplencias en Mestalla y en Wembley, Vidal no salió nada contento del estadio francés. Así lo insinuaron las palabras de Gerard Piqué, que tiró balones fuera cuando le preguntaron por el estado anímico del chileno: "No sé si está enfadado o no, pero en el vestuario estamos contentos con él".

Arturo Vidal en el banquillo durante el partido contra el Sevilla / EFE

El central añadió que "tiene nivel de sobra para jugar en los partidos importantes pero debe entender que hay otros jugadores que también lo merecen", algo que se podría considerar un palito en público para el centrocampista.

Las palabras del catalán dejaron entrever que Arturo Vidal salió mosqueado del Parc OL, de manera que otra suplencia en un partido importante del equipo (habrá tres en los próximos siete días) podría despertar a la bestia. Quizás ahora solo estamos contemplando la calma antes de la tormenta.